"Presentaremos el plan antes del 10 de febrero, con o sin acuerdo"

El ministro cree que se ha llegado a una situación de difícil salida por la negativa de los sindicatos a presentar una propuesta alternativa al, plan de la empresa pública que apoya el Gobierno. Su mayor preocupación es no retrasar la presentación del plan de Hunosa a Bruselas, cuyo plazo vence el próximo 10 de febrero.La CE ha abierto una ficha de infracción por el retraso producido en la entrega del plan, que "se ha registrado por la voluntad del Gobierno de pactarlo con los sindicatos". Pero en cualquier caso insiste en que va a respetar el plazo y "antes del 10 de febrero lo presentaremos ...

El ministro cree que se ha llegado a una situación de difícil salida por la negativa de los sindicatos a presentar una propuesta alternativa al, plan de la empresa pública que apoya el Gobierno. Su mayor preocupación es no retrasar la presentación del plan de Hunosa a Bruselas, cuyo plazo vence el próximo 10 de febrero.La CE ha abierto una ficha de infracción por el retraso producido en la entrega del plan, que "se ha registrado por la voluntad del Gobierno de pactarlo con los sindicatos". Pero en cualquier caso insiste en que va a respetar el plazo y "antes del 10 de febrero lo presentaremos dado que existe un requerimiento de la CE.

En estos momentos, las negociaciones se encuentran en un callejón sin salida. Se está convocando a los sindicatos a negociar, pero previamente se les dice que no se va a modificar mínimamente el plan de la empresa.

Para Aranzadi, el problema está, en que la empresa no puede modificar el plan de forma unilateral. En su opinión, si los sindicatos son los que se han levantado de la mesa, son ellos los que tienen que volver a sentarse y explicar "en qué no están de acuerdo". Afirma que si las modificaciones que proponen son compatibles con un programa de reducción de pérdidas se podrían aceptar. Pero se queja de que "hasta el momento ha sido imposible conocer la propuesta de la oposición". Asegura que ni la oposición ni los sindicatos pueden atacar el plan frontalmente, "por ello sólo critican las maneras, y cuando se hace eso, es porque no tienen razón en el fondo".