Un camarero dio su vida por evitar un atraco
Florencio Fuentes, de 37 años, natural de El Arenal (Ávila), murió ayer en Madrid tras haber recibido varios disparos durante un atraco en una güisquería del centro de San Blas.La víctima, que según fuentes policiales trabajaba como camarero en un bar cercano al local en el que se produjo el tiroteo, se enfrentó a tres atracadores para evitar el robo.
Según la Jefatura Superior de Policía, los hechos se sucedieron sobre las cuatro de la madrugada de ayer, en la güisquería JM de la calle de Movinda, número 5, cuando entraron tres ciudadanos y pidieron unas bebidas. Instantes después, uno...
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Florencio Fuentes, de 37 años, natural de El Arenal (Ávila), murió ayer en Madrid tras haber recibido varios disparos durante un atraco en una güisquería del centro de San Blas.La víctima, que según fuentes policiales trabajaba como camarero en un bar cercano al local en el que se produjo el tiroteo, se enfrentó a tres atracadores para evitar el robo.
Según la Jefatura Superior de Policía, los hechos se sucedieron sobre las cuatro de la madrugada de ayer, en la güisquería JM de la calle de Movinda, número 5, cuando entraron tres ciudadanos y pidieron unas bebidas. Instantes después, uno de ellos sacó una pistola y gritó que se trataba de un atraco.
Florencio Fuentes, que casualmente se encontraba en el local, se enfrentó a los atracadores con una banqueta y recibió "cuatro o cinco disparos que le alcanzaron en varias partes del cuerpo". Los atracadores se dieron a la fuga tras efectuar los disparos y se llevaron consigo el dinero que había en la caja de la güisquería.
Fuentes, aún con vida, fue trasladado al hospital Gregorio Marañón, donde falleció horas después de ser intervenido de las lesiones de los disparos.
Su cadáver fue conducido después al Instituto Anatómico Forense para efectuarle la autopsia.
Funcionarios de la Brigada de Policía Judicial se han hecho cargo de las investigaciones y ayer mismo interrogaron al personal de la güisquería.
Un amigo de infancia de Florencio Fuentes comentó ayer en el Anatómico Forense: "Era una bellísima persona. Aunque era pacífico, si alguien se metía con él siempre se defendía".