Bush reestructura su gabinete tras la dimisión de Sununu

La dimisión voluntaria de John Sununu, jefe del gabinete del presidente de EE UU, en la noche del martes ha obligado a George Bush a reorganizar su equipo presidencial cuando quedan menos de 11 meses para que se celebren las elecciones generales. El candidato número uno para sustituir al hasta ahora hombre fuerte del presidente es el actual secretario de Transportes, Samuel Skinner.Si la recesión económica, la situación sanitaria, económica y educativa no eran problemas suficientes, Bush se enfrenta ahora a una situación delicada. La sustitución de Sununu debe hacerse con rapidez y efic...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La dimisión voluntaria de John Sununu, jefe del gabinete del presidente de EE UU, en la noche del martes ha obligado a George Bush a reorganizar su equipo presidencial cuando quedan menos de 11 meses para que se celebren las elecciones generales. El candidato número uno para sustituir al hasta ahora hombre fuerte del presidente es el actual secretario de Transportes, Samuel Skinner.Si la recesión económica, la situación sanitaria, económica y educativa no eran problemas suficientes, Bush se enfrenta ahora a una situación delicada. La sustitución de Sununu debe hacerse con rapidez y eficacia. Los resultados electorales del próximo año dependen de ello.

El jefe del Gabinete, o secretario general de la Casa Blanca, es el encargado de coordinar todos los esfuerzos del equipo presidencial para mantener la imagen del presidente. Es la persona que se debe encargar de llevar a cabo los trabajos ingratos y las maniobras electorales que sean necesarias, por sucias que estas puedan parecer.

El presidente Bush se había visto presionado a lo largo de los últimos meses para deshacerse de Sununu. Algunos miembros de su gabinete se hallaban enfrentados con Sununu por el carácter agresivo e intolerante de este ultraconservador que ayudó a Bush a ganar las elecciones de 1988. Sununu, entonces gobernador de New Hampshire, dio el impulso definitivo a la campaña electoral de Bush, cuyo inicio fue muy débil y exento de votos.

En Washington también sonaban ayer los nombres de Dick Cheney, actual secretario de Defensa, y Fred Malek, un ex colaborador de Richard Nixon, para suceder a Sununu.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En