ETA asesina de un tiro en la nuca a un sargento de la Guardia Civil de 54 años en Galdakao

En una noche infame, fría y extremadamente lluviosa, ETA asesinó ayer en Galdakao (Vizcaya) al sargento de la Guardia Civil Pedro Carbonero Fernández, viudo, padre de cuatro hijos. El agente, de 54 años, estaba paseando cuando fue tiroteado por detrás y a bocajarro, minutos antes de las nueve de la noche, en el número 52 de la calle de Juan Bautista Uriarte. Un individuo, aparentemente joven, con barba, que acababa de descender de un taxi blanco Renault 21, se colocó a la espalda del guardia civil y le disparó un tiro en la nuca. El tiro era mortal de necesidad, pero el asesino realizó otros d...

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En una noche infame, fría y extremadamente lluviosa, ETA asesinó ayer en Galdakao (Vizcaya) al sargento de la Guardia Civil Pedro Carbonero Fernández, viudo, padre de cuatro hijos. El agente, de 54 años, estaba paseando cuando fue tiroteado por detrás y a bocajarro, minutos antes de las nueve de la noche, en el número 52 de la calle de Juan Bautista Uriarte. Un individuo, aparentemente joven, con barba, que acababa de descender de un taxi blanco Renault 21, se colocó a la espalda del guardia civil y le disparó un tiro en la nuca. El tiro era mortal de necesidad, pero el asesino realizó otros dos disparos más sobre el cuerpo de Pedro Carbonero antes de huir en el taxi, conducido por un segundo activista.

La víctima, que estaba destinada en el País Vasco desde el año 74, fue hospitalizada con suma celeridad por efectivos del servicio de asistencia en carretera DYA, pero los médicos del hospital de Galdakao sólo pudieron certificar su muerte, una hora después. Pedro Carbonero ingresó en el hospital con parada cardio-respiratoria y tres heridas por arma de fuego. Tenía una orifico de entrada en la nuca con salida en la frente y dos impactos más en los costados a la altura de la axila.El atentado, que sucede al asesinato del niño Fabio Moreno Asla, perpetrado igualmente en las proximidades de Bilbao, se produce en vísperas de la reunión que los partidos del Pacto de Ajuria enea celebrarán el próximo viernes.

Aunque el atentado no había sido reivindicado al cierre de esta edición, fuentes policiales dan por segura la autoría de ETA.

Los asesinos abandonaron el taxi a dos kilómetros del lugar de los hechos, en la calle Larrazabal de Basauri, donde su rastro se perdió anoche. Artificieros del Cuerpo Nacional de Policía inspeccionaron cuidadosamente el vehículo, sin resultados, en previsión de que pudiera albergar explosivos. El coche, matrícula BI-1925-BK, había sido robado a punta de pistola sobre las 20,30 horas en la parada de taxis del propio Galdakao. Todo hace suponer que los terroristas seguían los pasos del sargento y conocían muy bien su costumbre de dar una vuelta por la localidad antes de recluirse en la casa cuartel.

Pedro Carbonero tenía cuatro hijos, tres chicos y una chica, de edades comprendidas entre los 22 y los 27 años. Su cuerpo chocó en su caída con la fachada del número 52 de la calle y quedó recostado en un charco de sangre diluido por la lluvia.

La capilla ardiente del sargento fue instalada esta madrugada en el Gobierno Civil, informa Europa Press. El funeral tendrá lugar hoy en la iglesia de los Padres Agustinos de Bilbao alas 13.30.

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[La justicia francesa ha decretado la libertad provisional del presunto miembro del comando itinerante de ETA Jean Pierre Erramundeguy, Panpi, acusado en España de tres asesinatos. El etarra estaba en prisión desde abril de 1990, informa Aurora Intxausti.

Por otra parte, la televisión italiana difundió anoche una entrevista con un enmascarado que se dijo miembro de ETA. El activista justificó los atentados etarras contra intereses españoles en Italia, informa France Presse.]

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