El heredero de los zares pisa Rusia por primera vez en San Petersburgo

El gran duque VIadímir Kirílovich, heredero de la corona de los zares, visitó ayer San Petersburgo y pisó por primera vez en su vida la tierra que gobernaron sus antepasados. Tanto hoy como mañana, 740 aniversario de la revolución que llevó a los comunistas al poder, el heredero, su esposa y 10 nobles rusos que le acompañan participarán en la fiesta que ha organizado en la ciudad el alcalde, Anatoli Sobchak, para conmemorar el cambio de nombre de la antigua capital.

De la festividad del 7 de noviembre, que hasta hace bien poco servía para que el desfile de la plaza Roja mostrara al ...

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El gran duque VIadímir Kirílovich, heredero de la corona de los zares, visitó ayer San Petersburgo y pisó por primera vez en su vida la tierra que gobernaron sus antepasados. Tanto hoy como mañana, 740 aniversario de la revolución que llevó a los comunistas al poder, el heredero, su esposa y 10 nobles rusos que le acompañan participarán en la fiesta que ha organizado en la ciudad el alcalde, Anatoli Sobchak, para conmemorar el cambio de nombre de la antigua capital.

De la festividad del 7 de noviembre, que hasta hace bien poco servía para que el desfile de la plaza Roja mostrara al mundo la magnitud del poder soviético, ha quedado simplemente eso: la festividad. Los sectores reformistas conmemorarán a su manera la festividad, que en Moscú adquirirá la forma de un acto en memoria de las víctimas del comunismo, con oficio del patriarca Alexei II y procesión incluidos. Con todo, la celebración más espectacular es la que ha organizado el alcalde de la antigua Leningrado, que contará con la presencia del gran duque.

VIadímir Kirílovich Romanov, de 74 años, tantos como comunismo en su país, pudo expresar ayer a los soviéticos sus opiniones a través nada menos que de Trud, el órgano de los sindicatos. El gran duque defiende la monarquía como forma de Gobierno compatible con la democracia, "como puede comprobarse en muchos países de Europa", incluida España, que pone como ejemplo.

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