SANIDAD

Francia indemnizará a las víctimas de transfusiones de sangre con sida

El presidente francés François Mitterrand se comprometió ayer a indemnizar a las víctimas de transfusiones de sangre contaminada con sida y a reformar el Centre National de la Transfusion Sanguine (CNTS) francés. Mitterrand hizo estas dos promesas durante una reunión con los máximos responsables de la Asociacion Francesa de Hernoflilicos, que ha denunciado al Gobierno galo por la muerte de 200 personas que recibieron sangre infectada entre 1984 y 1985, informa Reuter. Mientras, dos de los tres procesados -los doctores Roux y Netter, del CNTS- por este escándalo han responsabilizado al Gob...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El presidente francés François Mitterrand se comprometió ayer a indemnizar a las víctimas de transfusiones de sangre contaminada con sida y a reformar el Centre National de la Transfusion Sanguine (CNTS) francés. Mitterrand hizo estas dos promesas durante una reunión con los máximos responsables de la Asociacion Francesa de Hernoflilicos, que ha denunciado al Gobierno galo por la muerte de 200 personas que recibieron sangre infectada entre 1984 y 1985, informa Reuter. Mientras, dos de los tres procesados -los doctores Roux y Netter, del CNTS- por este escándalo han responsabilizado al Gobierno del problema.

Tanto Roux como Netter,ex director general de la Salud el primero y ex director del Laboratorio Nacional de la Salud, el segundo, han sido procesados por "no asistencia a personas en peligro", fórmula mediante la cual se les acusa de no haber intervenido a tiempo para que cesase la utilización de sangre contaminada en transfusiones destinadas a hemofílicos. Jacques Roux, que es también miembro del Comité Central del Partido Comunista Francés (PCF), considera que su procesamiento "es perfectamente inadmisible. y está destinado a ocultar la responsabilidad de los ministros".

Según Roux, él reclamó en varias ocasiones, y desde 1983, que se "analizase sistemáticamente la sangre de los donantes y que se inactivase el virus a través del calentamiento de los productos sanguíneos. Quienes tenían el poder de decisión rehusaron proporcionarnos los recursos económicos necesarios para poner en práctica las medidas adecuadas". Las declaraciones del doctor Roux apuntan al ex primer ministro socialista Laurent Fabius, actualmente presidente del Parlamento, a la ex ministra de Asuntos Sociales, Georgina Dufoix, y a Pierre Beregovoy, en 1984 ministro de Economía y hoy superministro de Hacienda.

El tercero de los procesados por la juez Sabine Foulon, precisamente el ex director del CNTS, doctor Michel Garretta, sigue guardando silencio.

Archivado En