El Gobierno restituye a Yáñez en el V Centenario porque González se lo prometió si no era alcalde

El Consejo de Ministros nombró ayer a Luis Yáñez presidente de la Comisión Nacional para la Conmemoración del V Centenario del Descubrimiento porque así se lo había prometido el presidente del Gobierno, Felipe González, cuando aceptó ser candidato a la alcaldía de Sevilla en las elecciones del pasado 26 de mayo. Fuentes próximas al Gobierno añadieron, no obstante, que la categoría de subsecretario que conlleva el nuevo destino de Yáñez implica a su vez el abandono, por incompatibilidad, de sus otros dos cargos públicos: diputado nacional y concejal en el Ayuntamiento de Sevilla.

Luis Yá...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Consejo de Ministros nombró ayer a Luis Yáñez presidente de la Comisión Nacional para la Conmemoración del V Centenario del Descubrimiento porque así se lo había prometido el presidente del Gobierno, Felipe González, cuando aceptó ser candidato a la alcaldía de Sevilla en las elecciones del pasado 26 de mayo. Fuentes próximas al Gobierno añadieron, no obstante, que la categoría de subsecretario que conlleva el nuevo destino de Yáñez implica a su vez el abandono, por incompatibilidad, de sus otros dos cargos públicos: diputado nacional y concejal en el Ayuntamiento de Sevilla.

Más información

Luis Yáñez fue secretario de Estado de Cooperación para Iberoamérica y presidente de la comisión estatal del V Centenario desde 1985 hasta el pasado 1 de abril, en que dimitió del primero de estos cargos para ser el candidato del PSOE a la alcaldía de Sevilla y mantuvo la presidencia del V Centenario. De este puesto tuvo que dimitir también semanas después al ser fuertemente criticado por los otros candidatos a la alcaldía de Sevilla. Unas declaraciones del propio Yáñez diciendo que "sería bueno para Sevilla" que la presidencia del V Centenario fuera ejercida por el alcalde de la ciudad encrespó los ánimos hasta el punto de verse obligado a dimitir.Sin embargo, tras su fracaso electoral y la designación del andalucista Alejandro Rojas Marcos como nuevo alcalde de Sevilla, Yáñez se entrevistó con Felipe González en el palacio de la Moncloa y le expresó su deseo de volver a presidir la comisión nacional del V Centenario.

Fuentes próximas al Gobierno señalaron que Felipe González se había comprometido con Yáñez, de quien es amigo personal desde hace 30 años, a restituirle en él cargo si no salía elegido alcalde de Sevilla. Yáñez recordó insistentemente su deuda al presidente y éste le respondió que lo pensaría. Sin embargo, a la salida dio por hecho su nombramiento ante los periodistas.

Entrevista con Serra

Esta "autoproclamación" molestó a González, quien optó por aplazar su decisión. El siguiente paso dado por el presidente del Gobierno fue nombrar, el pasado 17 de julio, a Narcís Serra como vicepresidente del Alto Patronato para la Expo y el V Centenario, con funciones ejecutivas y de coordinación. Serra y Yáñez se entrevistaron en Madrid inmediatamente después.El vicepresidente del Gobierno, que había expresado su malestar por la pretensión de Yáñez de volver a la presidencia del V Centenario, incluyó al ministro Fernández Ordóñez, en el Consejo de Administración del Alto Patronato. De esta manera, Yáñez depende, en primer lugar, de Fernández Ordoñez, y después del propio Serra.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Por otra parte, el decreto aprobado ayer por el Gobierno le otorga rango de subsecretario y embajador extraordinario. Esta circunstancia, que según algunas fuentes fue solicitada por el propio Yáñez para delimitar jerarquía y funciones con Inocencio Arias, quien le sustituyó al frente de la secretarla de Estado, puede obligarle a dimitir de sus otros cargos.

La ley de Incompatibilidades de altos cargos sólo exceptúa de las mismas para simultánear "cargos obtenidos por representación popular" a los miembros del Gobierno y a los secretarios de Estado, pero nada dice de los subsecretarios.

Según esta interpretación, Luis Yáñez debería renunciar a su condición de diputado, además de la concejalía en el Ayuntamiento de Sevilla. El propio Yáñez desea dejar su puesto en la corporación local, ya que tiene previsto volver a instalar su domicilio en Madrid, pero nada ha manifestado en cuanto a su renuncia al acta de diputado. En cualquier caso, Yáñez dispone de tres meses, según la ley, para regularizar su situación.

La portavoz del Gobierno, Rosa Conde, manifestó ayer en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros que se ha pedido un informe jurídico para aclarar la situación. Conde añadió que en la designación ha primado "la continuidad y la eficacia de la presidencia".

El nombramiento de Luis Yáñez como presidente del V Centenario se ha realizado contra el criterio del vicepresidente del Ejecutivo, Narcís Serra, y de los Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, y Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero.

Desde el momento en que el PSOE perdió la alcaldía sevillana, según personas que han seguido muy de cerca el proceso, Yáñez se propuso regresar a Madrid y ocupar el puesto que ayer le concedió el Gobierno.

Su pretensión fue muy mal recibida en el departamento de Asuntos Exteriores, donde el cargo de secretario de Estado de Cooperación, dejado vacante por Yáñez, ya estaba cubierto por Inocencio Arias, hombre de total confianza de Fernández Ordóñez.

Su nombramiento puede producir un cúmulo de conflictos, según coinciden en afirmar distintas fuentes gubernamentales consultadas. No cuenta con el apoyo de Serra, ni sus relaciones en Asuntos Exteriores parece que sean las adecuadas para trabajar coordinadamente. El propio Yáñez pidió a González depender de ministro de Cultura o del de Relaciones con las Cortes para evitar la dependencia de Exteriores.

Yáñez manifestó ayer a Efe que con su nombramiento "se ha querido garantizar la culminación de un importante proyecto de Estado en el que está en juego la imagen internacional de España" y destacó como un acto brillante de su gestión la reciente cumbre de jefes de Estado Iberoamericanos celebrada en Guadalajara (México).

Archivado En