Leguina reclama más recursos económicos al Estado en su tercer discurso de investidura

El socialista Joaquín Leguina volvió ayer a someterse a una sesión de investidura en la Asamblea de Madrid -por tercera vez en ocho años- con un ofrecimiento de "continuidad sin continuismo". En esta ocasión, su discurso ante el pleno de la Cámara estuvo notablemente escorado hacia la izquierda y cargado de reivindicaciones económicas al Gobierno central, que, según afirmó, "centrifuga el déficit" hacia las comunidades autónomas.

Leguina puso especial cuidado en incluir en su intervención los contenidos del acuerdo programático suscrito el pasado viernes con Izquierda Unida, cuyos 1...

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El socialista Joaquín Leguina volvió ayer a someterse a una sesión de investidura en la Asamblea de Madrid -por tercera vez en ocho años- con un ofrecimiento de "continuidad sin continuismo". En esta ocasión, su discurso ante el pleno de la Cámara estuvo notablemente escorado hacia la izquierda y cargado de reivindicaciones económicas al Gobierno central, que, según afirmó, "centrifuga el déficit" hacia las comunidades autónomas.

Leguina puso especial cuidado en incluir en su intervención los contenidos del acuerdo programático suscrito el pasado viernes con Izquierda Unida, cuyos 13 diputados le auparán hoy de nuevo a la presidencia del Gobierno autónomo madrileño. Para Leguina se trata de "una apuesta de la izquierda por un nuevo Madrid".El pacto con la coalición comporta un detallado paquete de inversiones para los cuatro próximos años, que van desde 28 nuevos kilómetros en la red del metro hasta la construcción de 90.000 viviendas sociales, amén de la asunción de las plenas competencias en educación, sanidad y relaciones laborales.

Conocedor del estrangulamiento que atenaza las finanzas regionales, Leguina, que en raras ocasiones se ha servido de la tribuna del Parlamento autónomo para criticar al Gobierno central, planteó la necesidad de revisar el sistema de financiación de las comunidades autónomas, que debe regirse por los "principios de suficiencia, autonomía y corresponsabilidad". En la pasada legislatura, la Comunidad ha duplicado ampliamente el monto de sus presupuestos, hasta llegar a los 410.000 millones de pesetas.

"Se trata de evitar que se centrifugue déficit desde la Administración central a la Comunidad, como ocurre en la insuficiente financiación por parte del Estado de las transferencias en vivienda y transporte o en los servicios de sanidad que la Comunidad de Madrid suministra al Insalud".

Tras augurar que la negociación con el Gobierno será "larga y dura", propuso dos soluciones para paliar la escasez de recursos autonómicos: el traspaso directo de parte de la recaudación de los tributos estatales no cedidos a las regiones y -"para financiar inversiones y actuaciones con un interés social inexcusable y durante un plazo determinado"- los recargos autonómicos en el impuesto sobre la renta de las personas físicas.

Deuda estatal

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El Estado ha acumulado una deuda por los convenios de vivienda y del metro con la Comunidad que, según Leguina "tensionan al máximo la tesorería regional". Éste es el caso de los 21.000 millones de deuda por la operación de barrios en remodelación."Las políticas de contención del gasto público y del déficit impuestas por la Administración central se han trasladado nada amablemente a las comunidades autónomas", puntualizó el candidato en su discurso.

Sin embargo, la Comunidad deberá evitar que su carga financiera se dispare por encima del actual 16%. "Las empresas públicas de la Comunidad tendrán que mirar más a los bancos que a los presupuestos regionales", advirtió, antes de anunciar la creación de un holding político y administrativo de los entes públicos que operan en la región.

Leguina se ha esforzado hasta el último momento para que en su andadura de gobierno le acompañaran representantes de Izquierda Unida, informa Anabel Diez. Ha sido imposible, a pesar de la predisposición que existía en algunos dirigentes madrileños de IU. Antes de la sesión de investidura, Leguina telefoneó a Julio Anguita para concertar una entrevista en un último intento de convencerle. Anguita compartió un almuerzo con el dirigente socialista, pero no se movió un ápice de sus posiciones.

Aunque desde antes de las elecciones autonómicas del 26 de mayo Anguita era partidario de no entrar a formar parte de gobiernos socialistas, considera que es fundamental el apoyo mayoritario que ha recibido -para no incluir consejeros- avalado por el voto de "101 asambleas de base".

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Transporte público

Leguina: "La Comunidad ha apostado por la izquierda"

Leguina se propuso la encomiable tarea de que el automóvil particular sea una opción y no una obligación. Pero siempre que el transporte público sea cada vez más puntual, más rápido y más cómodo. Aunque se negó a hablar de un segundo Plan Felipe, sí avanzó que habrá un segundo plan de transportes: 28 nuevos kilómetros de metro, gestión de las cercanías de Renfe en el Consorcio Regional de Transportes, línea férrea San Sebastián de los Reyes-Alcobendas e intercambiador en Príncipe Pío.Al portavoz del Partido Popular, Alberto Ruiz Gallardón, todo esto le pareció "reaccionario", y especialmente la mención a un recargo en el impuesto sobre la renta. "Es un regreso político", sentenció, tras criticar "la abdicación de IU" que, a su juicio, ha renunciado a la reforma del Estatuto de Autonomía.

Por su parte, Isabel Vilallonga, portavoz de IU en la Asamblea, se jactó de que el discurso de Leguina hubiera sido "tan de izquierdas, aunque con lagunas". Inmediatamente, recordó que la coalición ha duplicado su número de escaños en la Cámara. Vilallonga anunció, no obstante, que hoy echará en cara a Leguina la falta de un acuerdo mas amplio.

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