CASO PENDIENTE

Los 'revientapisos' no veranean en la playa

Nueva operación policial para impedir la proliferación de robos en el domicilio

Al fin llegó el ansiado mes de julio. Los Martínez cargaron en el coche los utensilios de rigor: los bañadores, los flotadores, la barca hinchable, los cubos y las palas, la máquina de fotos y todo lo imprescindible para pasar las vacaciones a orillas del mar. Con la alegría de la marcha, la familia se olvidó de cerrar una ventana. Cuando volvieron a Madrid descubrieron que, gracias a ese pequeño olvido, un chorizo les había robado el vídeo y el televisor. Seguro que los Martínez adoptarán este año mayores precauciones antes de largarse a Benidorm.

Compruebe que todas las posibles entra...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Al fin llegó el ansiado mes de julio. Los Martínez cargaron en el coche los utensilios de rigor: los bañadores, los flotadores, la barca hinchable, los cubos y las palas, la máquina de fotos y todo lo imprescindible para pasar las vacaciones a orillas del mar. Con la alegría de la marcha, la familia se olvidó de cerrar una ventana. Cuando volvieron a Madrid descubrieron que, gracias a ese pequeño olvido, un chorizo les había robado el vídeo y el televisor. Seguro que los Martínez adoptarán este año mayores precauciones antes de largarse a Benidorm.

Compruebe que todas las posibles entradas de la casa quedan perfectamente cerradas, incluyendo las ventanas que dan a los patios", recomienda el Ministerio del Interior en un pequeño folleto titulado Acostumbre a su casa a quedarse sola. La recomendación parece de una obviedad casi insultante. Pero los expertos en la materia aseguran que "la práctica demuestra que hay mucha gente que deja abierta las ventanas para que haya ventilación y a la vuelta de las vacaciones no huela a cerrado".Otro consejo de la policía: "Recuerde que la puerta de su casa debe reunir unas condiciones mínimas de seguridad". Porque la verdad es que hay muchos ciudadanos que instalan dos o tres cerrojos, sin reparar en que eso no vale para nada mientras no cambien la puerta de cartón piedra que originalmente colocó el constructor de su vivienda. Otros ciudadanos hay que, por ahorrar unas pesetas, sólo mandan blindar una de las dos puertas de entrada a su casa. Y luego pasa lo que pasa: que los cacos no son tontos y echan abajo sin problemas la más endeble.

Muchas señoras -y muchos caballeros también- tienen la costumbre de comentar con sus amistades los planes maravillosos que tienen para este verano, sin escatimar el más mínimo detalle. Nada hay tan ingenuo y tan peligroso como tener este tipo de conversaciones, ya que tales datos pueden llegar a oídos de algún ratero que sabrá sacar provecho de ellos.

En verano, los madrileños no suelen dejar en el piso ni dinero ni joyas. Pero si usted decide no llevarse a la playa las alhajas, procure no esconderlas entre las sábanas ni en sitios improvisados. "Recuerdo el caso de una señora que, a la vuelta de las vacaciones, denunció que no encontraba los pendientes ni los anillos, ni los collares, por lo que ella dedujo que se los habían robado", relata un veterano inspector. Y añade: "Hicimos gestiones y todo resultó inútil. La mujer volvió unas semanas después y nos dijo que habían aparecido sus joyas. Nos explicó que las había ocultado en una caja de zapatos que se había llevado su hija a París. Y, claro, a la joven la amargaron su estancia en Francia".

Hay gente que no tiene la menor picardía. Ejemplo de ello puede ser esa familia que el año pasado se fue a pasar unos días a su pueblo y decidió dejar una nota pegada en la puerta para advertir al repartidor de butano: "Estarnos fuera. Por favor, deje una bombona a la vecina del tercero A". Los chorizos llegaron, vieron el cartelito, forzaron la entrada con un destornillador y se apoderaron de lo que más les gustó, con la certeza de que nadie les iba a molestar mientras trabajaban. Por eso, Interior pide a los vecinos que "no dejen señales de que la vivienda está desocupada".

Un veterano policía sostiene que -lo más eficaz es grabar el nombre o el número del DNI del dueño en el televisor, el video y en otros objetos de valor, ya que eso dificulta su posterior venta en el mercado negro y facilita nuestra labor de investigación". El jefe de la Brigada Judicial, Angel de Miguel, ha pedido la colaboración de los ciudadanos a fin de evitar los robos: "No dude en llamar al 091 si sospecha que ocurre algo raro en el domicilio de su vecino. Creemos que vale más comprobar que sólo era una falsa alarma antes que dejar pasar por alto un posible hecho delictivo".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Pese a todos los consejos de Interior, alrededor de 1.000 domicilios de la capital recibirán la visita de los maleantes durante los próximos tres meses, como viene ocurriendo durante los últimos años.

Adiós a los 'espadistas'

La estadística demuestra que se acabaron los espadistas finos que iban por el mundo armados únicamente con sus dedos y un juego de ganzúas. Ya apenas quedan manos-de-plata. Ahora, sólo el 10% de los robos en viviendas son cometidos mediante el empleo de una llave falsa. El 15% de los ladrones entran en las casas por el sistema del escalo, es decir, a través de puertas y balcones endebles o mal cerrados. Lo más frecuente es que los asaltantes recurran al bárbaro y poco refinado sistema del palanquetazo, consistente en vencer los cerrojos a la brava.

Los inquilinos de los pisos situados en los distritos de Chamartín, Buenavista, Entrevías, Estrella y Usera deben ponerse desde ahora mismo en alerta roja, pues no en balde es en estas zonas donde prefieren hacer el agosto los profesionales del robo a domicilio. Tampoco están libres de peligro las viviendas de Alcalá de Henares, San Sebastián de los Reyes, Getafe y Pozuelo de Alarcón.

Archivado En