Derechistas y comunistas ganan posiciones en Chipre a costa de los centristas

Los comunistas de Akel y sus rivales derechistas de Unión Democrática (DISY) ganan posiciones, a costa de los centristas, en el Parlamento de Nicosia tras las elecciones legislativas celebradas el domingo en Chipre, partido en dos desde que las tropas turcas invadieron y ocuparon el tercio norte de la isla en 1974.

Según los resultados provisionales, DISY continúa como el primer partido del país, con el 35,8% de los votos y 20 diputados (uno más de los que tenía) en la Cámara legislativa, de 56 escaños.Akel obtuvo el 30,6% y 18 escaños (aumenta 3). En cuanto al Partido Democrático (DIKO...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los comunistas de Akel y sus rivales derechistas de Unión Democrática (DISY) ganan posiciones, a costa de los centristas, en el Parlamento de Nicosia tras las elecciones legislativas celebradas el domingo en Chipre, partido en dos desde que las tropas turcas invadieron y ocuparon el tercio norte de la isla en 1974.

Según los resultados provisionales, DISY continúa como el primer partido del país, con el 35,8% de los votos y 20 diputados (uno más de los que tenía) en la Cámara legislativa, de 56 escaños.Akel obtuvo el 30,6% y 18 escaños (aumenta 3). En cuanto al Partido Democrático (DIKO), del ex presidente Spiros Kiprianu, perdió 8 puntos porcentuales (se quedó en el 19,5%) y 5 escaños (conserva 11), con lo que se desvanecen sus aspiraciones de volver a la jefatura del Estado en las elecciones de 1993. Por su parte, los socialistas de EDEK ganaron un escaño (se quedan en 7), pese a un ligerísimo descenso en el porcentaje de votos.

La presencia de un electorado conservador ("se vota comunista de padres a hijos", señala un analista) jugó sin duda un papel en el ascenso de Akel, junto al hecho de que el joven secretario general del partido, Dimitri Christofias -acusado por sus enemigos de utilizar "métodos estalinianos"-, supo ofrecer una imagen dinámica.

Los observadores aseguran que los resultados de los comicios pueden interpretarse como un voto de confianza en el presidente Georgios Vaisliu, un independiente que llegó al poder con el apoyo de los comunistas y la bandera de la flexibilidad para resolver la cuestión nacional, es decir, la reunificación de la isla.

Durante su mandato, ha promovido un arreglo con Turquía y con el líder turcochipriota, Rauf Denktash, para que Ankara acepte retirar a sus 29.000 soldados a cambio de cierta autonomía para la población turca del norte de la isla. Sin embargo, no ha obtenido resultados notables. Las posiciones de las dos comunidades siguen enfrentadas, pese a los esfuerzos de la ONU, que mantiene en la zona tampón que separa ambas zonas una fuerza de paz formada por varios miles de cascos azules.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En