El 'holding del Águila'
El primer accionista de Internacional de Seguros y sus colaboradores más inmediatos montaron una red de 22 sociedades instrumentales para vaciar el patrimonio y los fondos de la empresa, según la fiscalía. Estas sociedades, sin ningún tipo de solvencia, se daban soporte accionarial recíproco y creaban castillos financieros ficticios, como desvelaron las investigaciones Judiciales sobre el holding del Aguila.
Hasta el estallido de la crisis de Internacional de Seguros, Muñoz residió en un palacete céntrico de Barcelona, rodeado de jardines, "donde se comía siempre a la carta en me...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El primer accionista de Internacional de Seguros y sus colaboradores más inmediatos montaron una red de 22 sociedades instrumentales para vaciar el patrimonio y los fondos de la empresa, según la fiscalía. Estas sociedades, sin ningún tipo de solvencia, se daban soporte accionarial recíproco y creaban castillos financieros ficticios, como desvelaron las investigaciones Judiciales sobre el holding del Aguila.
Hasta el estallido de la crisis de Internacional de Seguros, Muñoz residió en un palacete céntrico de Barcelona, rodeado de jardines, "donde se comía siempre a la carta en mesas engalanadas con cubertería de oro macizo en las grandes ocasiones", explican testigos presenciales y amigos de la familia.
Acorralado por las pesquisas policiales, Muñoz Ramonet se refugió en Suiza de forma definitiva y desde su residencia en Ginebra relanzó la actividad Financiera a partir de dos bancos creados por él mismo. En estos últimos años, los intereses helvéticos de Muñoz Ramonet entraron también en crisis desde el momento en que las autoridades suizas pusieron el Spar und Kredit y el Génevoise de Comerce et Crédit -ambos propiedad de Muñoz- bajo control después de descubrir operaciones irregulares.