El aumento del dinero efectivo se debe a una 'huida fiscal', según el Banco de España

El espectacular aumento del dinero en efectivo durante los últimos cuatro años, que ha pasado ,de 2,3 a 4,4 billones de pesetas,obedece al peso de la economía sumergida y a una "huida fiscal", según recoge el último boletín económico del Banco de España en un artículo titulado El sistema de pagos español.

Dicho estudio recoge que "los principales factores subyacentes a la preferencia por el efectivo frente a otros medios de pago en principio más eficientes, ofrecen una explicación aparentemente sólida para el caso español". El banco emisor estima que "la fragmentación de la red c...

El espectacular aumento del dinero en efectivo durante los últimos cuatro años, que ha pasado ,de 2,3 a 4,4 billones de pesetas,obedece al peso de la economía sumergida y a una "huida fiscal", según recoge el último boletín económico del Banco de España en un artículo titulado El sistema de pagos español.

Dicho estudio recoge que "los principales factores subyacentes a la preferencia por el efectivo frente a otros medios de pago en principio más eficientes, ofrecen una explicación aparentemente sólida para el caso español". El banco emisor estima que "la fragmentación de la red comercial, la reducida tasa de participación en el mercado de trabajo y la elevada tasa de paro existente en el mercado español" son varios de los aspectos que justifican esa preferencia por el dinero en efectivo. No obstante, son "el peso relativo de la economía sumergida y las secuelas del ocultamiento fiscal" los que más han acentuado esa tendencia en los últimos años.

El informe es aún más explícito cuando reconoce que "tras la entrada en vigor del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) en 1986, los consiguientes efectos de huida de ciertos sectores de la economía, aflorados a partir de entonces por la transparencia que implicaba el nuevo impuesto, se reflejaron en una mayor preferencia por el efectivo como instrumento de pago fiscalmente más opaco".

Además, el Banco de España considera que la innovación en los instrumentos de pago "tiene una fuerza considerable" como pone de manifiesto la implantación de las tarjetas de crédito.