El fiscal pide 25 años de cárcel para un fraile acusado de siete delitos sexuales
El fraile franciscano Vicent Vicens Monzó, de 55 años, profesor de Educación Física, fue juzgado ayer en la Audiencia de Barcelona como presunto autor de siete delitos sexuales cometidos contra sus alumnos del colegio público Els Costarets, de Sant Pere de Ribes (Barcelona). El fiscal solicita para el fraile, que filmaba con una cámara de vídeo a los niños mientras se duchaban y a dos de ellos desnudos en su propia cama, 25 años de prisión y seis años de inhabilitación.
Pese a que la vista se celebró a puerta cerrada, en las inmediaciones de la sala se respiraba un ambiente enrarecido d...
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El fraile franciscano Vicent Vicens Monzó, de 55 años, profesor de Educación Física, fue juzgado ayer en la Audiencia de Barcelona como presunto autor de siete delitos sexuales cometidos contra sus alumnos del colegio público Els Costarets, de Sant Pere de Ribes (Barcelona). El fiscal solicita para el fraile, que filmaba con una cámara de vídeo a los niños mientras se duchaban y a dos de ellos desnudos en su propia cama, 25 años de prisión y seis años de inhabilitación.
Pese a que la vista se celebró a puerta cerrada, en las inmediaciones de la sala se respiraba un ambiente enrarecido debido a que alrededor del acusado se han formado dos bandos totalmente enfrentados: por un lado, los padres y los niños víctimas que tendrán que declarar y, por otro, la directora del colegio y los profesores que defienden acérrimamente al acusado.Curiosamente, entre este último grupo se encuentran las dos adolescentes de 15 y 13 años que, según el fiscal, Vicens filmó en su casa, desnudas y adoptando posiciones obscenas hace ya al menos seis años.
El fiscal sostiene en sus conclusiones provisionales que el procesado cometió entre 1984 y 1990 tres delitos de agresiones sexuales, dos delitos de corrupción de menores y dos delitos de estupro, aprovechando su condición de profesor de Educación Física.
Según el ministerio público, el fraile exhibió sus genitales a través de un "minúsculo pantalón" en repetidas ocasiones a seis niñas de edades comprendidas entre los 8 y 12 años; que irrumpía en las duchas de las menores y que, esgrimiendo que debía tomarles el pulso les realizaba tocamientos en los pechos; y que además, realizó tocamientos en los genitales a dos jóvenes de 14 y 15 años en una ocasión en que estaban de excursión.
El procesado negó en la vista que abusara de los menores y recordó que él era un gran aficionado al vídeo, por lo que filmaba todo lo que estaba a su alcance "Yo lo hacía para seguir la evlución vital de las niñas", se defendió el fraile.