EE UU dice que ha destruido 61 aeropuertos

Estados Unidos no tiene la más mínima duda sobre el resultado final de la guerra contra Irak iniciada en la madrugada del 17 de enero: la derrota final del presidente Sadam Husein y la expulsión de las tropas iraquíes de Kuwait. "Sadam no puede cambiar el rumbo básico del conflicto, que terminará con su derrota", afirmó tajantemente el secretario de Defensa, Dick Cheney. Por su parte, el jefe del Estado Mayor conjunto, general Colin Powell, anunció que la actual estrategia aliada consiste en "aislar al Ejército iraquí en torno a Kuwait hasta conseguir su puesta fuera de combate". Powell dijo q...

Estados Unidos no tiene la más mínima duda sobre el resultado final de la guerra contra Irak iniciada en la madrugada del 17 de enero: la derrota final del presidente Sadam Husein y la expulsión de las tropas iraquíes de Kuwait. "Sadam no puede cambiar el rumbo básico del conflicto, que terminará con su derrota", afirmó tajantemente el secretario de Defensa, Dick Cheney. Por su parte, el jefe del Estado Mayor conjunto, general Colin Powell, anunció que la actual estrategia aliada consiste en "aislar al Ejército iraquí en torno a Kuwait hasta conseguir su puesta fuera de combate". Powell dijo que los aviones aliados han destruido 61 de los 66 aeropuertos iraquíes y neutralizado gran parte de los sistemas de defensa aérea.

También anunció que los bombardeos llevados a cabo por la aviación norteamericana y aliada desde el comienzo de la guerra han conseguido eliminar los dos linicos reactores nucleares existentes en Irak y que, en la actualidad, se concentran en la destrucción de las instalaciones destinadas a la producción de armainento químico y biológico.Los dos jefes del Pentágoilo, que comparccieron conjuntamente ante los medios informativos para hacer un amplio balance de la marcha de las operaciones una semana después del comienzo de la guerra, advirtieron, sin embargo, que la tarea de desalojar a las tropas iraquíes de Kuwait no será fácil.

Cheney, tras recordar que los aliados se enfrentan a un país que posee la cuarta fuerza militar del mundo, dirigido por un líder que se ha gastado 50.000 millones de dólares en la última década en la compra de armamento, rinanifestó que hubiera sido utópico pensar que "se podría destruir el potencia bélico iraquí en una semana".

El secretario de Defensa expresó su seguridad de que Sadam utIlizará todos los abundantes medios a su alcance "para intentar romper la coalición aliada y evitar una derrota". Pero no podrá cambiar el rumbo básico del conflicto, que terminará con su derrota final", dijo.

Por su parte, Powell, que exhibió ante los periodistas una serie de gráficos y fotografías trucadas con el Fin de no revelar la ubicación exacta de los objeticos destruidos, declaró que los aliados han logrado una clara superioridad aérea, a pesar de que sólo 41 de los 800 aviones de combate iraquíes habían sido destruidos.

Ningún blanco

La superioridad aérea no se mide por el número de aviones derribados, ni por las salidas efectuadas ni por el número de bombas arrojadas, sino por lo que la fuerza aérea iraquí haya podido hacer desde el comienzo de la operación. Y la realidad es que, en una semana de carripaña, ningún avión enemigo ha podido llevar a cabo un ataque contra ningún blanco de la coalición, explicó Powell.

La principal explicación de esta falta de actividad de la aviación iraquí, que no excluye en palabras de Powell su eventual utilización masiva en el futuro, se debe a que las sucesivas oleadas de bombardeos aliados, que en una semana han realizado más de 10.000 misiones de combate y de apoyo, se han concentrado en la destrucción de las pistas de los aeropuertos.

Segán datos ofrecidos por Powell, los aviones aliados destruyeron en los primeros días de operaciones 61 de los 66 aeropuertos iraquíes y neutralizaron una gran parte de los sistemas de defensa aérea compuestos principalmente por cohetes soviéticos tierra-aire SAM.

Cheney reconoció que, durante una visita realizada a Moscú el pasado otoño, funcionarios de la URSS le habían asegurado que Irak no tenia ningún armamento oculto del que Estados Unidos no tuviera conocimiento.

Powell y Cheney se refirieron a los Scud como armas, psicológicas y políticas sin valor militar -comparables a los V-I y, V-II lanzados por los alemanes contra Londres en la II Guerra Mundial- y manifestaron que, hasta el momento, Irak no habíal anzado anteriormente ningún misil con otro armamento que no fuera convencional.

El jefe del Estado Mayor conjunto se negó a revelar cuándo se produciría un ataque por tierra para desalojar a los' iraquíes de Kuwalt, pero dejó muy claro que no sería antes de haber intentado "debilitar profundamente con bombardeos masivos a las tropas de Sadam Husein concentradas en y en torno al emirato.

Powell fue lo suficientemente expl ícito coi-no para deducir que las operaciones aéreas emprendidas hasta ahora son un juego de ninos comparadas a las que se han comenzado a lanzar contra los efectivos iraqUíes de tierra. "Nos lanzaremos contra todo aquello que perrinite a un ejército moverse, depósitos de rriuniciones, de comida, silos, camiones, tanques, y. si es necesario, estamos concentrando una considerable fuerza de tierra para terminar el trabajo, dijo.

[El presidente norteaniericano, George Bush, telei'oncó el martes al primer ministro alemán, Helmut Kohl, para hablar del "reparto de gastos" en la guerra del Golfo, informó ayer en Washington el portavoz norteamericano, Marlin Fitzwater].