Cartas al director

Denigrante oposición

Bochornosa y denigrante son las calificaciones más suaves que se me ocurren para describir la situación que el pasado día 12 de diciembre, en la Feria de Muestras de Bilbao, nos tocó vivir a los 6.000 (según cifras de los organizadores) opositores que nos presentamos a las pruebas de auxiliar administrativo convocadas por el Gobierno vasco.Me explico. A pesar de que la convocatoria de las pruebas era para las nueve de la mañana, hasta pasadas las 9.30 no se nos comunicó por megafonía que podíamos acceder a los pabellones 7 y 8.

¿Se imaginan ustedes el caos que supone el que tanta gente ...

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Bochornosa y denigrante son las calificaciones más suaves que se me ocurren para describir la situación que el pasado día 12 de diciembre, en la Feria de Muestras de Bilbao, nos tocó vivir a los 6.000 (según cifras de los organizadores) opositores que nos presentamos a las pruebas de auxiliar administrativo convocadas por el Gobierno vasco.Me explico. A pesar de que la convocatoria de las pruebas era para las nueve de la mañana, hasta pasadas las 9.30 no se nos comunicó por megafonía que podíamos acceder a los pabellones 7 y 8.

¿Se imaginan ustedes el caos que supone el que tanta gente se ponga en movimiento al mismo tiempo, con el paraguas abierto porque llueve, la máquina de escribir en brazos (a rastras, los más afortunados), sorteando las caravanas de los feriantes del PIN y viendo con incredulidad que, una vez saltados o esquivados todos los enganches de las mismas, no tienes otra alternativa que cruzar por medio de un jardín o retroceder para acceder por uno de los costados?

Ése fue sólo el comienzo. Porque una vez que nos acomodaron a todos, cosa que llevó su tiempo, por megafonía, y como dirigiéndose a niños de parvulario, empezaron las instrucciones y recomendaciones para, una vez ya todos helados y aburridos, comunicamos que iba a comenzar la prueba de temas. La duración de la misma iba a ser de 30 minutos, y cada pregunta erróneamente contestada tenía una penalización de 0,33 puntos o, lo que es lo mismo, un punto cada tres preguntas. En ese momento se pidió al cuidador de nuestra zona que nos mostrase en qué parte de las bases de la convocatoria figura este extremo. Seguidamente firmamos la impugnación de la prueba.

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Y seguimos esperando y pasando frío. Por fin, más instrucciones pata decimos que la prueba de mecanografía tendrá una duración de 10 minutos y con ella finalizará el examen.

El resultado total de todo este absurdo es que, para dos únicas pruebas que se hicieron, con un total de 40 minutos de duración, tuvimos que estar allí hasta las 13.15.

Y otra consideración. Ya que disponíamos de tanto tiempo, ¿por qué no se le ocurrió a alguien el darnos a conocer cómo es el pitido de emergencia? Porque carteles había por todos los lados, pero...

Para mí es incomprensible e inadmisible que a estas alturas del siglo XX, cuando existen técnicas tan avanzadas en todos los campos, todavía se dé este tipo de situaciones con personas, en este caso en inferioridad de condiciones, que lo único que pretenden, de la forma más digna posible, es el conseguir un puesto de trabajo.-

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