Telefónica no ejercerá acusación por las escuchas a Garaikoetxea

La Compañía Telefónica de España ha rehusado presentar un escrito de acusación ante la sala de lo penal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco en el caso de: las escuchas al ex lehendakari Carlos Garaikoetxea. Los asesores jurídicos de la empresa argumentan que la postura de la fiscalía "refleja fielmente la posición de Telefónica.", dicen, "por lo que hemos decidido seguir personados en el caso, pero sin ejercitar nuestro derecho de acusación".Las escuchas al ex presidente se produjeron en su domicilio particular de Zarauz, en 1986. El entonces director de Telefónica, Luis So...

La Compañía Telefónica de España ha rehusado presentar un escrito de acusación ante la sala de lo penal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco en el caso de: las escuchas al ex lehendakari Carlos Garaikoetxea. Los asesores jurídicos de la empresa argumentan que la postura de la fiscalía "refleja fielmente la posición de Telefónica.", dicen, "por lo que hemos decidido seguir personados en el caso, pero sin ejercitar nuestro derecho de acusación".Las escuchas al ex presidente se produjeron en su domicilio particular de Zarauz, en 1986. El entonces director de Telefónica, Luis Solana, informó a Garaikoetxea de que el teléfono de su domicilio estaba intervenido, pero que Telefónica estaba al margen de la operación. La compañía semipública reconocía así, por primera y única vez, un caso de escuchas ilegales desde el comienzo de la transición.

El Tribunal Superior de Justicia pidió a Telefónica que presentara un escrito de acusación en los términos recogidos por la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Sin embargo, los servicios jurídicos de la empresa han preferido trasladar todas la pruebas técnicas al fiscal, Jesús Cardenal.

Telefónica España ha estado personada en el sumario desde el primer momento, pero nunca ha ejercitado su papel de acusación. Los letrados afirman que se personaron "por si finalmente", aseguran, "el tema nos salpicaba y manchaba el honor de los trabajadores de Telefónica. Desde el principio estaba muy claro cuáles eran las partes implicadas y qué papel había jugado cada una de ellas", explicaron.