La Generalitat amenaza al barrio del Besòs con retirar el plan global de equipamientos

La Generalitat y el Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs (Barcelona) amenazaron ayer a la comisión vecinal del Besòs con retirar el plan global de equipamientos para el barrio si los vecinos no aceptan la construcción de las 194 viviendas. Los portavoces de los vecinos comunicaron ayer a la Administración su decisión de aceptar las mejoras previstas para la zona y los pisos, pero en otro emplazamiento que no sea el polémico solar de la palmera. Los representantes de la Administración solicitaron una semana para estudiar la propuesta, que supone replantear el programa de mejoras de 1.600 millone...

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La Generalitat y el Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs (Barcelona) amenazaron ayer a la comisión vecinal del Besòs con retirar el plan global de equipamientos para el barrio si los vecinos no aceptan la construcción de las 194 viviendas. Los portavoces de los vecinos comunicaron ayer a la Administración su decisión de aceptar las mejoras previstas para la zona y los pisos, pero en otro emplazamiento que no sea el polémico solar de la palmera. Los representantes de la Administración solicitaron una semana para estudiar la propuesta, que supone replantear el programa de mejoras de 1.600 millones.El conflicto entra ahora en un punto de difícil solución, especialmente porque la Generalitat sostiene que no existen otros solares para levantar los edificios de viviendas. Felip Puig, director general de Servicios Comunitarios, fue tajante: "En el Besòs no hay terreno; en La Mina no caben y en el barrio de La Catalana, otro de los emplazamientos que se ha sugerido, no puede ser, porque esa zona requiere una actuación urbanística independiente".

Ante esta situación, Puig y el director general de Arquitectura y Vivienda, Francesc Ventura, solicitaron una semana de plazo para estudiar la oferta de los vecinos. "Durante estos siete días deberemos realizar un intenso, ejercicio de imaginación", afirmó irónicamente Puig, "para buscar una solución". La reunión evidenció que las dos partes defienden posturas tan diferenciadas, que difíciImente podrán coincidir. El aspecto positivo que desprendió el encuentro, celebrado en la sede del Síndic de Greuges (Defensor del Pueblo catalán), es que el diálogo continuaba y la tregua se aseguró. 2.000 vecinos ratificaron anoche en asamblea su intención de mantener la paz en el barrio.

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