La dieta de los españoles es peor tras el ingreso en la CE
Los hábitos alimentarios de los españoles, que desde hace unos años se alejan de la tradicional dieta mediterránea, han empeorado desde la entrada de España en la Comunidad Europea, según demostró ayer, estadísticas en mano, la doctora Susana Sans, directora del programa Cronicat de la Generalitat de Cataluña, en una conferencia internacional promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La conferencia estuvo dedicada a evaluar el resultado del programa Mónica de la OMS, cuyo objetivo es reducir la incidencia de la mortalidad por accidentes cardiovasculares, y se realizó medi...
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Los hábitos alimentarios de los españoles, que desde hace unos años se alejan de la tradicional dieta mediterránea, han empeorado desde la entrada de España en la Comunidad Europea, según demostró ayer, estadísticas en mano, la doctora Susana Sans, directora del programa Cronicat de la Generalitat de Cataluña, en una conferencia internacional promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La conferencia estuvo dedicada a evaluar el resultado del programa Mónica de la OMS, cuyo objetivo es reducir la incidencia de la mortalidad por accidentes cardiovasculares, y se realizó mediante conexión directa, vía satélite, de 30 ciudades del mundo, entre ellas Barcelona.La conferencia puso de manifiesto la paradoja de que, mientras los países del norte de Europa y Estados Unidos están intentando modificar sus hábitos dietéticos, en algunos casos con notable éxito, para acercarse a la dieta mediterránea, los habitantes de España y otros países ribereños están abandonando sus saludables menús tradicionales para adoptar algunos hábitos que tan nefastos efectos han demostrado en los países más ricos.
La sustitución del aceite de oliva por la mantequilla para cocinar, el abuso de los productos lácteos, la creciente utilización de las llamadas comidas rápidas 0 la ingestión excesiva de proteínas, en detrimento de las legumbres y las verduras tradicionales, son algunos de los cambios que están repercutiendo negativamente sobre la salud de la población. Según la doctora Sans, desde la entrada de España en la CE se ha triplicado el porcentaje de grasas saturadas importadas de otros países.
El resultado es que en España el 57% de los adultos presenta niveles de colesterol superior a 250 milígramos, lo que representa un factor de riesgo importante. Siete son los principales enemigos a combatir si se quiere reducir la incidencia de enfermedades cardiovasculares: el tabaquimso, el abuso del alcohol, el exceso de grasas,el exceso de calorías y de sal, el estrés y el sedentarismo.