Solchaga prevé una recesión con cierre de empresas si no se moderan beneficios y salarios

El Gobierno se ha planteado tres ejes en su política de ajuste económico para afrontar los efectos de la crisis del Golfo: mantenimiento de la restricción monetaria un año más, un severo recorte en el gasto público para 1991 y la moderación en salarios y beneficios. El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, hizo ayer un llamamiento a las fuerzas sociales para que acepten un pacto social basado en un menor incremento de sus rentas porque en caso contrario "se pagará con el cierre de empresas y despidos". Sendos informes del Fondo Monetario Internacional y de la Comunidad Europea reco...

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El Gobierno se ha planteado tres ejes en su política de ajuste económico para afrontar los efectos de la crisis del Golfo: mantenimiento de la restricción monetaria un año más, un severo recorte en el gasto público para 1991 y la moderación en salarios y beneficios. El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, hizo ayer un llamamiento a las fuerzas sociales para que acepten un pacto social basado en un menor incremento de sus rentas porque en caso contrario "se pagará con el cierre de empresas y despidos". Sendos informes del Fondo Monetario Internacional y de la Comunidad Europea recomiendan, por su parte, una lucha decidida contra la inflación.

El ministro de Economía afirmó ayer, en su primera explicación detallada sobre los efectos del conflicto del Golfo: "Somos más pobres que antes de la crisis, por ello, "todos tenemos que hacer un esfuerzo de buena fe porque quien se escape a esta responsabilidad lo pagará con el cierre de empresas y mayor desempleo". Carlos Solchaga lanzó ayer así un nuevo mensaje para defender restricciones en el aspecto monetario, el fiscal y las rentas. Afirmó que la crisis va a aumentar el índice de precios al consumo un punto este año, y punto y medio el que viene; el crecimiento se reducirá un 0,5 este año y un punto en 1991, y el déficit exterior puede llegar hasta el 5% el próximo ejercicio si no se toman las medidas oportunas.Tras la intervención del ministro, el presidente del Gobierno, Felipe González, expresó en Suecia su confianza en que "la reacción de las fuerzas sociales sea responsable". A su llegada a Suecia, donde pasará este fin de semana, el presidente afirmó, sin embargo, que "no hay que dramatizar las medidas de ajuste porque la situación no es tan preocupante como en la crisis de 1973 y otras posteriores".

El PP presentó ayer una interpelación urgente al Gobierno para que explique las medidas anunciadas. El CDS e Izquierda Unida, por su parte, han achacado la necesidad del ajuste económico que propone el Gobierno a su equivocada política desarrollada hasta ahora.

El Consejo de Ministros de Finanzas de la CE estudia hoy en Roma un informe sobre los efectos que la crisis del Golfo tendrá en la inflación y el déficit exterior y que plantea como objetivo prioritario la lucha contra una espiral de precios. El informe aboga por la moderación salarial, que implica incluso una pérdida del poder adquisitivo, y hace especial hincapié en la coordinación de las políticas económicas de todos los países comunitarios.

El Fondo Monetario Internacional, en un anexo a su informe anual sobre la evolución de la economía, expresa la necesidad de que los Gobiernos tomen rápidamente las medidas necesarias para paliar los efectos del conflicto del Golfo "para que no se vuelvan a cometer los errores del pasado". El FMI vaticina menor crecimiento y empleo en general y predice mayores males para los países en vías de desarrollo dependientes del petróleo.

Páginas 31 y 32

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