Dos 'fornidos' dejan la Embajada española en la capital de Cuba

Felipe Nerey y Ricardo Figuera, dos de las nueve personas que penetraron en la Embajada española el 21 de julio en petición de refugio y cuyo perfil y verdaderas intenciones originaron sospechas (se les conoce como los fornidos), abandonaron su encierro ayer, con lo que actualmente permanecen en la sede diplomática 16 cubanos.Nerey dijo sentirse mal y fue trasladado a un hospital de La Habana, donde fue dado de alta tras ser examinado, y pasó a su domicilio, mientras que Figuera manifestó que dejaba la legación para estar con su compañero.

Las quejas de Felipe Nerey Fonseca fueron comun...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Felipe Nerey y Ricardo Figuera, dos de las nueve personas que penetraron en la Embajada española el 21 de julio en petición de refugio y cuyo perfil y verdaderas intenciones originaron sospechas (se les conoce como los fornidos), abandonaron su encierro ayer, con lo que actualmente permanecen en la sede diplomática 16 cubanos.Nerey dijo sentirse mal y fue trasladado a un hospital de La Habana, donde fue dado de alta tras ser examinado, y pasó a su domicilio, mientras que Figuera manifestó que dejaba la legación para estar con su compañero.

Las quejas de Felipe Nerey Fonseca fueron comunicadas a las 0.30 horas de ayer por uno de los geo encargados de su atención y vigilancia, por lo que el diplomático español de turno en la misión efectuó gestiones para localizar un médico, pero finalmente se decidió organizar su salida y traslado al hospital Enrique Cabrera. En este sentido se informó al Ministerio de Relaciones Exteriores cubano de que uno de los refugiados quería salir de la Embajada.

Funcionarios cubanos y espa ñoles acompañaron al paciente hasta el recinto hospitalario, jun to con Figuera Laredo, que en todo momento siguió a su compañero, y allí se diagnosticó a Fe lipe Nerey síntomas de intoxica ción.

Tras el alta médica, uno de los dosfornidos regresó a la Embaja da española y comunicó al resto del grupo a través de una ventana que se encontraban bien y que no querían continuar en su inte rior.La salida de estas dos personas ha hecho concebir esperanzas sobre una decisión similar por parte de quienes penetraron en la sede diplomática española el mismo día.Las nueve personas que íngresaron en la Embajada española lo habían hecho en dos grupos. El primero, de cuatro hombres, lo hizo a las dos de la madrugada, saltando desde una terraza contigua; el segundo, de cinco, trepó por la cornisa de una casa semidestruida. Los diplomáticos españoles decidieron separarlos del resto de refugiados y alojarlos en el sótano del edificio, desde donde, sin embargo, mantienen comunicación con el exterior a través de unas ventanillas enrejadas.El resto de los refugiados, que ocupa la planta superior de la embajada, se dedica a la lectura y escuchar la radio y no ha manifestado hasta el momento decisión firme de abandonar su encierro en tanto no se garantice la salida del país.Fuentes cubanas han insistido en que las embajadas no se convertirán en "agencias de viaje" y que todo aquel que desee emigrar deberá cumplir los trámites preceptivos.Mientras tanto las negociaciones para encontrar una fórmula que satisfaga a España y Cuba han resultado infructuosas y el ambiente en que se desarrollan se ha deteriorado progresivamente. Un alto funcionario del Ministerio de Relaciones cubano criticó este fin de semana la posición española en la negociación mientras que los representantes de Madrid aluden, por su parte, a la postura inflexible de las autor¡ dades de La Habana.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En