Solchaga recuerda que las exenciones de la 'supercaixa' solo dependen de él

El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, declaró ayer en Córdoba que la concesión de exenciones fiscales sólo es competencia suya, informa José Luis Rodríguez. El ministro, que se trasladó a Andalucía para intervenir en la campaña electoral autonómica y reunirse con un grupo de empresarios, no quiso comentar la reunión de anteanoche con el presidente del Gobierno catalán, Jordi Pujol."Le compete a la Generalitat dar el permiso para el proceso de fusión", señaló, "pero es el Gobierno, y no la Generalitat, en función de las características de la fusión, quien decide las bonificacione...

El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, declaró ayer en Córdoba que la concesión de exenciones fiscales sólo es competencia suya, informa José Luis Rodríguez. El ministro, que se trasladó a Andalucía para intervenir en la campaña electoral autonómica y reunirse con un grupo de empresarios, no quiso comentar la reunión de anteanoche con el presidente del Gobierno catalán, Jordi Pujol."Le compete a la Generalitat dar el permiso para el proceso de fusión", señaló, "pero es el Gobierno, y no la Generalitat, en función de las características de la fusión, quien decide las bonificaciones fiscales". "Es conveniente", concluyó, "que cada cual se atenga a sus competencias, y que estas no se mezclen. No hay nada que negociar en el tema de las exenciones fiscales".

Jordi Pujol, quien se encuentra de visita en Bruselas, coincidió con las apreciaciones ministeriales: "Les aseguro que yo no he hablado con Solchaga para negociar las exenciones de la supercaixa", declaró en la capital belga, según informa José Antich. "El encuentro se decidió hace dos, meses con objeto de abordar diversos aspectos de negociación entre ambos gobiernos, fundamentalmente las reformas del IRPF y de la financiación autonómica", agregó Pujol.

A pesar de estas declaraciones, fuentes cercanas a las cajas catalanas tienen la impresión de que el encuentro sirvió para que ambas partes constataran la necesidad de un proceso rápido sobre la fusión, que podría obtener unas exenciones de alrededor de 120.000 millones.