El Pentágono pretende reducir drásticamente los gastos de defensa aérea

El llamado dividendo de paz, producto de la distensión internacional, empieza a reflejarse en los presupuestos estadounidenses tras la propuesta hecha el jueves al Congreso por el responsable del Pentágono, Richard Cheney, que prevé una drástica reducción en los gastos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos cercana a los 38.000 millones de dólares.

Tal reducción, que equivale a unos cuatro billones de pesetas, será detralda en los próximos seis años. La propuesta del secretario de Defensa está centrada principalmente en la compra y desarrollo de nuevas unidades para la USAF y afecta de ma...

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El llamado dividendo de paz, producto de la distensión internacional, empieza a reflejarse en los presupuestos estadounidenses tras la propuesta hecha el jueves al Congreso por el responsable del Pentágono, Richard Cheney, que prevé una drástica reducción en los gastos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos cercana a los 38.000 millones de dólares.

Tal reducción, que equivale a unos cuatro billones de pesetas, será detralda en los próximos seis años. La propuesta del secretario de Defensa está centrada principalmente en la compra y desarrollo de nuevas unidades para la USAF y afecta de manera notable a la flota del bombardero B-2, conocido popularmente como Stealth o avión invisible por su capacidad de penetrar defensas enemigas y descargar sus bombas nucleares sin ser detectado por el radar.Según la propuesta, el Pentágono ha decidido reducir los pedidos de Stealth del número original de 135 a sólo 75. El B2 es el avión más caro del mundo, con un coste de 530 millones de dólares (cerca de 60.000 millones de pesetas), que ahora pasará a 815 al disminuir los pedidos.

Igualmente afectados por la propuesta de Cheney se encuentran el gigantesco avión de transporte C-17A, que pasa de 210 a 120 unidades, y el programa secreto de avión táctico de futuro, un caza para la Marina que todavía se encuentra en fase de diseño, que verá reducido su total de 858 a 620 unidades.

La Marina tradicional no se salva tampoco del hacha de Cheney, que ha propuesto una reducción de 14 a 12 en el número de portaviones en servicio. Según manifestó el secretario de Defensa ante el comité de fuerzas armadas de la Cámara de Representantes, el corte de programas aéreos supondrá un ahorro en el presupuesto del Pentágono de cerca de 17.000 millones de dólares en los próximos cinco años y de otros 18.000 a finales de 1997. Los ahorros en el próximo año fiscal serán modestos, 2.400 millones de dólares de los cerca de 307.000 millones solicitados al Congreso por el presidente Bush.

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