El fiscal pide 500.000 pesetas de indemnización a dos escoltas del vicepresidente sirio

El abogado de la dueña de un restaurante de Puerto Banús (Marbella) que denunció a cuatro escoltas del vicepresidente sirio, Rifaat el Assad, ha solicitado cinco días de arresto menor para cada uno de ellos por faltas de coacciones leves y daños intencionados. El fiscal pide que Georges Saliba y Zreik Malek -únicos sobre los que considera probada su participación- sean condenados a una multa de 7.500 pesetas o arresto sustitutorio y una indemnización de 500.000 pesetas.

Al juicio de faltas, que se celebró ayer en esta localidad malagueña, no han asistido ni los cuatro denunciados, s...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El abogado de la dueña de un restaurante de Puerto Banús (Marbella) que denunció a cuatro escoltas del vicepresidente sirio, Rifaat el Assad, ha solicitado cinco días de arresto menor para cada uno de ellos por faltas de coacciones leves y daños intencionados. El fiscal pide que Georges Saliba y Zreik Malek -únicos sobre los que considera probada su participación- sean condenados a una multa de 7.500 pesetas o arresto sustitutorio y una indemnización de 500.000 pesetas.

Al juicio de faltas, que se celebró ayer en esta localidad malagueña, no han asistido ni los cuatro denunciados, sobre los que el juzgado desconoce si residen o no en España, ni su representante legal. La vista oral, que ha sido presidida por la titular del Juzgado del Distrito número uno de Marbella, Blanca Díez García, se pruduce tras la denuncia presentada el 13 de agosto de 1988 por Carmen Martínez, propietaria de un restaurante situado en el complejo Benabola, donde Rifaat el Assad tiene importantes intereses económicos.En la denuncia se afirmaba que el marroquí Zreik Malek, que ha reconocido ser el jefe de escoltas de Assad cuando se encuentra en la Costa del Sol, los sirios Hassan Munir y Samir Houssrey y el libanés Georges Saliba irrumpieron en el restaurante y produjeron destrozos por valor de más de 1.600.000 pesetas, con el ánimo de intimidar a su propietaria para que vendiera el local.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En