Carmelo, o cuál de los dos

Dos hermanos que firman con un solo nombre abordan la dirección de "La Gaceta de Canarias"

Son hermanos y a lo mejor si hubieran sido gemelos no serían tan iguales. Uno tiene 33 años y el otro es un año más joven. Son Martín y Carmelo Rivero. Al juntarse, cosa que hicieron hace mucho tiempo, adoptaron el orden inverso y firman como Carmelo Martín. Con ese espíritu siamés, ellos, que nunca trabajaron en un periódico, dirigen ahora en su isla un diario de reciente aparición, La Gaceta de Canarias.

Desde hace más de diez años son los corresponsales de este periódico en Tenerife y en esta redacción nunca han podido distinguir quién es uno y quién es otro. Viéndoles trabajar ya se...

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Son hermanos y a lo mejor si hubieran sido gemelos no serían tan iguales. Uno tiene 33 años y el otro es un año más joven. Son Martín y Carmelo Rivero. Al juntarse, cosa que hicieron hace mucho tiempo, adoptaron el orden inverso y firman como Carmelo Martín. Con ese espíritu siamés, ellos, que nunca trabajaron en un periódico, dirigen ahora en su isla un diario de reciente aparición, La Gaceta de Canarias.

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Desde hace más de diez años son los corresponsales de este periódico en Tenerife y en esta redacción nunca han podido distinguir quién es uno y quién es otro. Viéndoles trabajar ya se sabe que lo hacen todo al mismo tiempo y ya ni ellos mismos se distinguen entre sí.La identidad de los carmelos ha llegado a ser legendaria en las islas y en algún momento ha resultado tan misteriosa como la del señor Casamajor del programa radiofónico de Javier Sardá. ¿Quién es Carmelo, y quién es Martín? Han trabajado juntos siempre y siempre los contratan al mismo tiempo. "Nunca decimos quién es uno y quién es otro" dice uno de los dos. Como no han podido unificar la voz, sin embargo, uno de ellos, Carmelo ha sido responsable de información de la cadena SER en Tenerife y ha llevado un programa diario. Al tiempo, sin embargo, trabajaban en una Caja de Ahorros.

Tienen una capacidad casi bruja para multiplicarse. Cuando se entregó Ángel Cabrera El Rubio, el sospechoso del secuestro y asesinato del industrial canario Eufemiano Fuentes, recibieron de Madrid la orden habitual: "Queremos que Cubillo diga algo. Búsquenlo debajo de las piedras". Era domingo de agosto. Lo buscaron debajo de las piedras y lo encontraron en la arena de una playa. Su capacidad de pesquisa marea a los políticos isleños, porque se enteran de cualquier cosa sin mover una mano.

Dormir por el otro

La noche de la salida de su periódico, la pasada semana, explicaron el secreto con pocas palabras: "Cada uno hace lo que tiene que hacer y como ahora no podemos dormir uno duerme por el otro. ¿Está claro?". No estudiaron periodismo. Ni tenían excesiva experiencia de redacción. El periódico en el que ahora trabajan juntos ha nacido con las dificultades técnicas habituales: el primer día salieron a las ocho de la mañana. Cuarenta y ochohoras después aún no se sabe cuál de los dos fue el que durmió.

No discuten entre ellos porque apenas se hablan: no es distancia, es conocimiento. "¿Para qué hablar si ya sabemos qué hay?" Así que se comunican, prácticamente, con gestos y con monosílabos. Se pensaría que uno tiene un carácter y el otro esdiferente. Tampoco es así: se compensan mutuamente y cuando uno es colérico el otro es manso y viceversa. Las preguntas sobre como pueden dirigir un diario dos personas, aunque en la mancheta solo figure una, queda respondida por la experiencia de verles trabajar: no son dos. Carmelo Martín es uno solo.

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