Una amistad que nunca existió

Un viejo principio periodístico indica que una sola fuente es insuficiente para redactar bien una noticia sobre un conflicto y es desastrosa para redactar un buen reportaje. Si, además, los titulares no se corresponden con lo que afirma el reportaje, el resultado es previsible. Éste es el caso de Menem y el hotel de los líos, reportaje publicado el pasado 17 de septiembre en la sección de Internacional de este diario. La información, que llevaba el subtítulo Un millonario saudí amigo del presidente argentino, protagonista de un gran escándalo inmobiliario en Buenos Aires estaba f...

Un viejo principio periodístico indica que una sola fuente es insuficiente para redactar bien una noticia sobre un conflicto y es desastrosa para redactar un buen reportaje. Si, además, los titulares no se corresponden con lo que afirma el reportaje, el resultado es previsible. Éste es el caso de Menem y el hotel de los líos, reportaje publicado el pasado 17 de septiembre en la sección de Internacional de este diario. La información, que llevaba el subtítulo Un millonario saudí amigo del presidente argentino, protagonista de un gran escándalo inmobiliario en Buenos Aires estaba firmada por Carlos Ares y narraba la polémica compra de un edificio en el centro de Buenos Aires para la construcción de un hotel.Los titulares del reportaje vinculaban al presidente de la República de Argentina, Carlos Menem, y al principal accionista de la compañía que compró el edificio, Ghaith Pharaon. Las quejas no se han hecho esperar. De los lectores, por lo que consideran injusto trato respecto al presidente argentino, y del propio Ghaith Pharaon que se considera injuriado por las acusaciones que lo relacionan con el lavado de narcodólares y que se recogen en el reportaje.

Ricardo Miguel Sommariva ha escrito una larga carta indignado por "la tendenciosa actitud de EL PAÍS contra el presidente argentino, a quien varias veces se ha intentado menoscabar, distorsionando los hechos y faltando a la obligación de objetividad que tiene todo medio informativo".

Una de sus quejas respecto al reportaje citado es la falta de relación entre lo que se afirma en los titulares y la información remitida desde Buenos Aires por Carlos Ares. "El encabezamiento de la noticia nada tiene que ver con la noticia en sí", afirma Ricardo Miguel Sommariva, "peor aún: según el corresponsal, el negocio sucio deriva de una ordenanza municipal aprobada el año pasado, cuando el manejo de Buenos Aires estaba en manos de Facundo Suárez Lastra, radical de la Coordinadora, designado por el propio Alfonsín. Según la Constitución argentina el cargo de alcalde de Buenos Aires no es electivo, sino que lo cubre el Presidente del país según su libre albedrío".

El periodista que editó en Madrid el reportaje reconoce que cometió un error al establecer en titulares una relación de amistad entre Menem y el inversor Saudí, error al que fue inducido por la lectura del reportaje.

La queja del lector sobre la "tendenciosidad" de este diario respecto a la figura del presidente de Argentina no es la primera que recibe el ombudsman. Las críticas de los lectores, muchas de ellas razonables, subrayan el diferente trato recibido por Menem respecto a su predecesor en la Casa Rosada. Un análisis de estas quejas y de lo publicado por este diario refleja que las protestas se han producido por artículos de opinión o análisis, más que por las crónicas de la corresponsalía en Buenos Aires o por los editoriales del diario. Los artículos más polémicos han sido escritos por ciudadanos argentinos residentes en España, salvo un artículo aparecido en la sección de humor de El País Semanal, de difícil encaje en el estilo de este diario.

Ghaith R. Pharaon

Por su parte el financiero saudí Ghaith Pharaon ha dirigido una carta al director en la que afirma que el reportaje está "plagado de falsedades, tergiversando los hechos de tal modo que significan graves injurias hacia mi persona" en relación, sobre todo, con su supuesta vinculación con el lavado de narcodólares. Pharaon subraya que la información se basa en un libro del periodista argentino Rogelio García Lupo, contra el que ha presentado una querella por difamación, extremo que estaba reflejado en la crónica.

"De ahí que no es cierto", agrega Pharaon, "que yo haya reconocido los hechos que se me atribuyen, como da a entender el artículo de El PAÍS, sino todo lo contrario, ya que el haber iniciado una querella criminal por el delito de injurias es por la falsedad de los mismos y significan mi más rotundo rechazo de ellos".

El inversor saudí niega también que hubiera conocido a Carlos Menem en Paraguay, como afirma el artículo, y considera inexactas e injuriosas otras afirmaciones como que sea protagonista de un gran escándalo inmobibario o que se haya permitido a la sociedad Hotel Corporation of Argentina comprar por 3,5 millones de dólares un inmueble valorado en 12 millones".

Carlos Ares, colaborador del diario en Buenos Aires, indicó al ombudsman que el escándalo inmobiliario existe, ya que el fiscal de la Cámara Federal de lo Criminal denunció la ordenanza municipal que permitió la compra de terrenos y así lo ha recogido la prensa argentina. Indicó que no existe vinculación de amistad entre el millonario saudí y el presidente Menem, un error no atribuible a su crónica, y que intentó contrastar las acusaciones que aparecen en el libro de García Lupo con los abogados de Pharaon sin conseguir respuesta.

Este último extremo no aparece reflejado en la crónica publicada, como exige el código interno de este diario que obliga a contrastar en todos los casos con las personas afectadas las acusaciones que se les formulan. Carlos Ares señaló que en ningún caso ha sido su intención hacer un proceso de intenciones sino reflejar un escándalo ampliamente recogido por la prensa local.

'Ertzaina' absuelto

El diario del pasado 2-3 de septiembre publicó una columna del servicio de documentación sobre los ertzainas detenidos desde 1981 por su presunta relación con ETA u otros, delitos. En la lista figuraba Pedro Gametxo "detenido en la localidad vizcaína de Bermeo" con motivo de un "atentado terrorista que costó la vida a dos guardias civiles". La columna, que apareció en la sección de España, indicaba que Pedro Gametxo había sido puesto en libertad bajo fianza, pero no recogía una información que debía haber aparecido. Pedro Gametxo fue absuelto de todos los cargos por la Audiencia Nacional en Junio del año pasado y así fue publicado en su día por este diario. El servicio de documentación debía haber actualizado sus datos.

Para facilitar a los lectores la comunicación con el ombudsman pueden ponerse en contacto directo llamando al teléfono 754 45 53 de Madrid.