LA PRECAMPAÑA ELECTORAL

El Gobierno aplaza sus citas con la OTAN

El Gobierno intenta potenciar los aspectos de la política exterior que estima electoralmente más rentables y, paralelamente, cancelar algunas citas que considera impopulares, empezando por aquellas contraidas con la OTAN. El ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, declaró, al hacerse pública la convocatoria de los comicios, que "no podía parar la máquina de la política exterior por las elecciones" pero, en opinión de algunos diplomáticos, "una parte de la máquina ha dejado de funcionar".

El próximo mes tenían previsto pasar por España el secretario general de la Ali...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Gobierno intenta potenciar los aspectos de la política exterior que estima electoralmente más rentables y, paralelamente, cancelar algunas citas que considera impopulares, empezando por aquellas contraidas con la OTAN. El ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, declaró, al hacerse pública la convocatoria de los comicios, que "no podía parar la máquina de la política exterior por las elecciones" pero, en opinión de algunos diplomáticos, "una parte de la máquina ha dejado de funcionar".

El próximo mes tenían previsto pasar por España el secretario general de la Alianza Atlántica, el alemán occidental Manfred Woerner, que, de camino hacia la reunión del Grupo de Planes Nucleares (GPN) de la OTAN en el Algarve portugués, hubiese pronunciado el 23 de octubre una conferencia ante la Asociación Atlántica, y el comandante en jefe de las fuerzas aliadas en Europa, el general norteamericano J. Galvin, cuya estancia iba a ser de cuatro días de duración. Ambas visitas han sido anuladas.El aparente temor a brindar a los medios de comunicación la oportunidad de recordar la vinculación de España con la organización de defensa occidental parece evidente. El Ministerio de Defensa renunció, por ejemplo, a su proyecto de invitar por primera vez a periodistas españoles a seguir unas pequeñas maniobras navales atlánticas (Deterrent Force II) que se desarrollarán en octubre y en las que la Marina de guerra española estará presente.Deseoso de mostrar la aportación de la Marina española al ejercicio naval que tendrá lugar en el Mediterráneo, el cuartel general de la Alianza (SHAPE) sí ha propuesto a corresponsales de prensa españoles acreditados en Bruselas que cubran Deterrent Force II, pero sigue esperando la autorización de Defensa.Si el Gobierno cree que el recordatorio de sus, lazos con la OTAN puede serle perjudicial, en ciertos sectores de la opinión pública debe también pensar que la presencia del presidente François Mitterrand y de varios ministros franceses en Valladolid cinco días antes de la cita electoral puede serle beneficiosa. Cuando le recibió en El Escorial en agosto, Felipe González pidió al jefe de Estado francés que adelantase al 23 y 24 de octubre su gran cumbre anual apalabrada para principios de diciembre. Su huésped aceptó.

Prevista desde antes del verano, la visita que González efectuará a Washington el 18 y 19 de octubre para entrevistarse con el presidente de EE UU, George Bush, no ha sufrido, en cambio, ninguna modificación sustancial. El vicepresidente Alfonso Guerra intentó, a su vez, obtener una cita con el líder soviético, Mijail Gorbachov. Para que resultase más fácil, Guerra proyectaba viajar a Moscú como responsable de la revista teórica socialista Sistema (600 ejemplares de difusión), según reconoció la ministra portavoz, Rosa Conde.Por otra parte, el Gobierno desestimó en junio pasado la oferta que le había sido formulada para que un español desempeñase uno de los más altos cargos de la Alianza Atlántica, el de asistente del secretario general para las infraestructuras, la logística y las operaciones del Consejo Atlántico, según fuentes de la organización.

La explicación al rechazo es que, aunque cumple con los compromisos que se ha marcado con relación a su participación en la OTAN, el Gobierno español no parece tener interés en asumir el menor protagonismo en la Alianza Atlántica.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En