El alcalde de Allariz consigue presidir un pleno

El alcalde de Allariz (Orense), Leopoldo Pérez Camba, accedió ayer a la casa consistorial por vez primera desde el pasado 11 de agosto para presidir un pleno municipal en el que se sortearon los miembros de las mesas electorales de la localidad. Los vecinos que permanecen encerrados en el Ayuntamiento para solicitar la dimisión del alcalde, militante del PP, abandonaron las dependencias municipales durante dos horas para facilitar que se celebrase la sesión.Pérez Camba fue increpado por un grupo de vecinos concentrados ante la casa consistorial que, una vez celebrado el pleno, le despidier...

El alcalde de Allariz (Orense), Leopoldo Pérez Camba, accedió ayer a la casa consistorial por vez primera desde el pasado 11 de agosto para presidir un pleno municipal en el que se sortearon los miembros de las mesas electorales de la localidad. Los vecinos que permanecen encerrados en el Ayuntamiento para solicitar la dimisión del alcalde, militante del PP, abandonaron las dependencias municipales durante dos horas para facilitar que se celebrase la sesión.Pérez Camba fue increpado por un grupo de vecinos concentrados ante la casa consistorial que, una vez celebrado el pleno, le despidieron con gritos de "Pinochet, Pinochet". Uno de los concentrados protagonizó también un conato de agresión al alcalde, pero el fuerte despliegue de agentes de la Guardia Civil impidió que se produjesen incidentes de importancia.

Tras la celebración del pleno, los vecinos volvieron a ocupar el Ayuntamiento, postura que mantienen desde hace mes y medio para forzar la dimisión de Pérez Camba, el tercer militante del Partido Popular que gobierna el municipio desde las pasadas elecciones municipales. Los encerrados aclamaron como "alcalde" al concejal del Bloque Nacionalista Galego (BNG), grupo mayoritario de la oposición, Anxo Quintana, el principal cabecilla de la protesta.

El alcalde se dirigió el pasado día 15 al presidente del Gobierno para solicitar la dimisión de la corporación y la convocatoria de elecciones anticipadas ante la imposibilidad de continuar gobernando el Ayuntamiento. El alcalde adoptó esta decisión tras renunciar al desalojo por la fuerza de la casa consistorial, que la Guardia Civil había intentado infructuosamente en dos ocasiones.

El pasado lunes el PP y el BNG reanudaron las negociaciones para buscar una salida al conflicto, pero no consiguieron acercar sus posturas. Los encerrados insisten en que no depondrán su actitud mientras el alcalde no dimita.

El encierro de los vecinos se inició el pasado 11 de agosto en protesta por la contaminación del río Arnoia, donde se registró una masiva mortandad de peces.