Un 'James Bond' bajo sospecha judicial

El ex jefe del espionaje militar portugués niega tener vinculaciones con los GAL

El comandante Pedro Manuel Almeida Serradas Duarte, ex responsable de la Dirección de Informaciones de la 2ª División del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas (DINFO), ha negado cualquier vínculo con la trama terrorista de los GAL en el transcurso de una conversación mantenida con este periódico. Serradas ha sido citado hoy a declarar ante el tribunal de Lisboa que juzga a los cinco componentes de la trama terrorista organizada en Portugal y que actuó en 1982 y 1983 en el sur de Francia contra refugiados de ETA. Los jueces han citado además a dos militares para que aclaren las supuestas...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El comandante Pedro Manuel Almeida Serradas Duarte, ex responsable de la Dirección de Informaciones de la 2ª División del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas (DINFO), ha negado cualquier vínculo con la trama terrorista de los GAL en el transcurso de una conversación mantenida con este periódico. Serradas ha sido citado hoy a declarar ante el tribunal de Lisboa que juzga a los cinco componentes de la trama terrorista organizada en Portugal y que actuó en 1982 y 1983 en el sur de Francia contra refugiados de ETA. Los jueces han citado además a dos militares para que aclaren las supuestas vinculaciones de este departamento militar con los GAL.

Más información

El comandante Pedro Manuel Almeida Serradas Duarte vive desde hace más de dos años acosado por la sombra de los GAL. Sus supuestas implicaciones en la trama terrorista le han colocado en una situación profesional y personal delicada que ha coincidido con su salida del Ejército y con un nuevo destino mucho más cómodo y aséptico en la sociedad civil; en el equipo de gerencia de una empresa privada multinacional especializada en sistemas de seguridad. Serradas ocupa un minúsculo despacho de un edificio impersonal, situado en la avenida 25 de Abril, del polígono industrial de Linda a Velha, a pocos kilómetros de Lisboa."No tengo nada que ver con los GAL", ha asegurado reiteradamente el ex militar, sentado al otro lado de la mesa. Tiene el aspecto de un policía, pero sus gestos le traicionan y descubren su verdadera personalidad; la de un león enjaulado. Parece como si pugnara por saltar por encima del escritorio e intentara salir de nuevo a la calle para recuperar aquel título con que le bautizó la prensa lisboeta -"James Bond portugués"- en su época dorada, cuando dirigía el equipo de seguridad más importante del país y vigilaba y perseguía a los terroristas integrantes del comando FPS 25 de Abril.

"Estoy aquí por motivos familiares y personales", ha agregado el ex militar, mientras saca de encima de la mesa una imperceptible mota de polvo y se coloca, a continuación, de forma perpendicular la corbata, encima del pecho. Rehúye hacer declaración alguna sobre el tema. "Los servicios de información están para otras cosas más serias que para hacer desmentidos a la Prensa", continúa Serradas.

Para este ex comandante del Ejército portugués el tema de los GAL quedó zanjado ante el tribunal de Viana do Castelo hace dos años, cuando fueron juzgados cinco terroristas y se les impusieron penas que oscilaban entre los tres y los cinco años de cárcel. Ahora dice sorprenderse al enterarse de que hay pendiente en Lisboa un nuevo juicio contra los mismos terroristas por su supuesta participación en los atentados contra los bares Batzoki y Consolation del País Vasco francés. "Creía que todo esto estaba ya acabado", puntualiza.

"No he recibido ninguna convocatoria para declarar ante el tribunal de Lisboa en este nuevo juicio", ha añadido. "Por otra parte sólo iría a declarar si me dieran permiso mis superiores, o el presidente del Gobierno", ha recalcado el ex militar, mientras da por finalizada la conversación.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Pocos días después de efectuadas estas declaraciones los jueces del tribunal de Lisboa encargados del caso insistían en la necesidad de que el ex militar compareciera e la vista para aclarar determinados aspectos de las relaciones de la DINFO con los GAL. Los magistrados anunciaron públicamente que reclamarían la presencia en la sala de Serradas y de uno de sus superiores, el ex jefe del Estado Mayor general Lemos Ferreira, hoy jubilado. El tribunal ha citado también para hoy a un tercer militar, subordinado de Serradas, el teniente coronel Fernando Ramos.

A pesar de estas citaciones oficiales los abogados defensores que intervienen en el caso no confían en que Serradas y los otros dos militares comparezcan en la vista. No en vano los supuestos vínculos del GAL y la DINFO establecidos a través de un misterioso hombre puente, el confidente Mario Correia Da Cunha, han sido tratados como un verdadero secreto de Estado.

Archivado En