CONSUMO

Ford indemniza al comprador de un coche que desapareció en un concesionario

La empresa Ford España, SA, ha indemnizado con 2.777.130 pesetas a Alberto Prats, un valenciano que adquirió un automóvil del modelo Sierra con defectos de fabricación. Prats llevó el coche ocho veces a reparar en los dos meses siguientes a la compra y finalmente dejó el vehículo en un concesionario y nunca más supo de él. Prats se querelló, pero los tribunales no han considerado el hecho como delictivo.

La querella se presentó por una presunta apropiación indebida de un automóvil, ya que nadie daba razón del paradero del mismo, tras la última avería y posterior depósito en un conce...

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La empresa Ford España, SA, ha indemnizado con 2.777.130 pesetas a Alberto Prats, un valenciano que adquirió un automóvil del modelo Sierra con defectos de fabricación. Prats llevó el coche ocho veces a reparar en los dos meses siguientes a la compra y finalmente dejó el vehículo en un concesionario y nunca más supo de él. Prats se querelló, pero los tribunales no han considerado el hecho como delictivo.

La querella se presentó por una presunta apropiación indebida de un automóvil, ya que nadie daba razón del paradero del mismo, tras la última avería y posterior depósito en un concesionario de la localidad alicantina de Denla. La acción penal ya ha sido archivada por el juez, y la empresa y el cliente han llegado al acuerdo extrajudicial.La Audiencia Provincial de Valencia remitió el pasado mes de enero un exhorto a la Audiencia de Madrid para que ésta citara a declarar a los; presidentes de Ford EE UU, Alemania Occidental -el modelo Sierra se fabrica en ese país- y España. Finalmente, un representante de esta empresa multinacional declaró ante el juez, y los tribunales entendieron que no cabía hablar de la existencia de un hecho delictivo.

En el escrito firmado por Prats al cobrar la indemnización se especifica que en la cantidad recibida se incluye el precio del automóvil y los daños y perjuicios sufridos a consecuencia de las múltiples averías del coche.

La empresa Ford informó a este periódico que los defectos detectados en el automóvil se debían al montaje de accesorios eléctricos no homologados, situación que fue corregida posteriormente por los propios técnicos de la empresa Ford.

La Audiencia Provincial de Valencia, en el texto del exhorto, ya sospechó que la vía penal no era la más adecuada para resolver el conflicto, pero ordenó investigar la querella, que en primera instancia había archivado el juez instructor.

Por el contrario, en el texto de la querella el letrado de Alberto Prats hablaba de un evidente riesgo para la vida, de los ocupantes del vehículo, a consecuencia de las averías que se produjeron en momentos inoportunos. "En tres ocasiones el vehículo se ha parado en el momento de efectuar adelantamientos", se señalaba. Finalmente, empresa y denunciante han llegado al acuerdo poco más de un año después de interponerse la querella.

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