La disputada playa de Taba pasará a soberanía egipcia

Israel ha perdido el arbitraje sobre la posesión de Taba, ese grano de arena del Sinaí cuya superficie no sobrepasa los 1,2 kilómetros cuadrados, situado sobre el mar Rojo. Los 600 metros de playa, incluido el hotel Senesta y la villa de vacaciones Nelson, pasarán a la soberanía egipcia. Oficialmente, el documento de la comisión internacional de arbitraje de Ginebra no será remitido hasta mañana a los representantes de ambos países.

Después de recibir el documento, ambas partes tendrán 21 días para pedir aclaraciones y 30 días para aplicar sus decisiones.La coalición derechista Likud y ...

Israel ha perdido el arbitraje sobre la posesión de Taba, ese grano de arena del Sinaí cuya superficie no sobrepasa los 1,2 kilómetros cuadrados, situado sobre el mar Rojo. Los 600 metros de playa, incluido el hotel Senesta y la villa de vacaciones Nelson, pasarán a la soberanía egipcia. Oficialmente, el documento de la comisión internacional de arbitraje de Ginebra no será remitido hasta mañana a los representantes de ambos países.

Después de recibir el documento, ambas partes tendrán 21 días para pedir aclaraciones y 30 días para aplicar sus decisiones.La coalición derechista Likud y el Partido Laborista se acusan mutuamente de ser responsables de la pérdida de Taba. El ministro del Likud Moisés Arens, que preside el estado mayor electoral del partido del primer ministro, Isaac Shamir, acusa al laborista Simón Peres, ministro de Exteriores, de haber "renunciado" a Taba buscando sistemáticamente "tranquilizar a los egipcios" e insistiendo en que el Gobierno acepta el arbitraje.

Por su parte, el ministro laborista Moisés Shalal afirmó que Israel podría haberse entendido con Egipto y llegar a un compromiso sobre Taba, pero que los esfuerzos en ese sendido fueron saboteados por el Likud.

De hecho, la cláusula sobre el arbitraje en torno a Taba fue firmada por el que fue ministro de Defensa, Ariel Sharon, en nombre del Gobierno de Menajem Beguin.

Peres propuso no discutir la soberanía egipcia sobre Taba con el fin de obtener, a cambio, el libre acceso de los israelíes al hotel Sonesta y a la villa Nelson, que permanecería bajo la gestión de Israel. Shamir y el Likud rechazaron la propuesta, la negociación fracasó y la disputa fue confiada a una comisión internacional de arbitraje.