Militares birmanos participan en las protestas contra el Gobierno

Oficiales retirados del Ejército birmano participaron el sábado en las manifestaciones contra el Gobierno que se celebraron en la ciudad de Mawbi, situada en las proximidades de Rangún y sede de importantes guarniciones. Estas informaciones coincidieron con los rumores sobre supuestas divisiones en el interior de las fuerzas armadas entre partidarios y opositores del Gobierno.

Los actos de protesta de la oposición al Gobierno continuaron ayer en Rangún, la capital, donde miles de funcionarios, maestros, monjes budistas y estudiantes exigieron la dimisión del nuevo presidente birmano...

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Oficiales retirados del Ejército birmano participaron el sábado en las manifestaciones contra el Gobierno que se celebraron en la ciudad de Mawbi, situada en las proximidades de Rangún y sede de importantes guarniciones. Estas informaciones coincidieron con los rumores sobre supuestas divisiones en el interior de las fuerzas armadas entre partidarios y opositores del Gobierno.

Los actos de protesta de la oposición al Gobierno continuaron ayer en Rangún, la capital, donde miles de funcionarios, maestros, monjes budistas y estudiantes exigieron la dimisión del nuevo presidente birmano, Maung Maung, y la sustitución del régimen de partido único por una democracia pluralista.

Según informó ayer un diario oficial birmano, oficiales retirados del Ejército participaron el sábado en una manifestación antigubernamental que reunió a unos 20.000 opositores. El mismo periódico informó también que 310 miembros del Partido del Programa Socialista Birmano -que gobierna el país- se unieron a dicha protesta tras haber presentado su dimisión.

Fuentes diplomáticas en Rangún apuntan a una creciente tensión entre el 502 escuadrón de las fuerzas aéreas y la 22 división del ejército de tierra, ambas estacionadas en Mawbi, escenario de las principales protestas del sábado. Al parecer, numerosos soldados vigilan la ciudad de cara a una posible intervención de las fuerzas aéreas, supuestamente simpatizantes de los opositores al régimen. "No hay por qué excluir un enfrentamiento violento, aunque todavía nos hallemos en un estadio preliminar", afirmó ayer un diplomático occidental en Rangún al admitir la posibilidad de que se extienda en el Ejército la simpatía por los opositores.

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