Incidentes en el levantamiento de la terraza del Riscal
El Ayuntamiento de Madrid desmanteló ayer la terraza Riscal, en el número 29 del paseo de la Castellana. Es la primera que se desmonta en la llamada costa de la Castellana, y en la operación se produjeron incidentes cuando la fuerza pública -al menos 40 policías nacionales y municipales procedieron a levantar por la fuerza a empleados y amigos de los propietarios que intentaban obstaculizar pacíficamente el desmantelamiento.El levantamiento de las instalaciones y la retirada de los enseres se llevó a cabo con un mandamiento judicial, un año después de que comenzara la pugna jurídica y a...
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El Ayuntamiento de Madrid desmanteló ayer la terraza Riscal, en el número 29 del paseo de la Castellana. Es la primera que se desmonta en la llamada costa de la Castellana, y en la operación se produjeron incidentes cuando la fuerza pública -al menos 40 policías nacionales y municipales procedieron a levantar por la fuerza a empleados y amigos de los propietarios que intentaban obstaculizar pacíficamente el desmantelamiento.El levantamiento de las instalaciones y la retirada de los enseres se llevó a cabo con un mandamiento judicial, un año después de que comenzara la pugna jurídica y administrativa entre el Ayuntamiento y los propietarios.
La abogada de los dueños, Eugenia Pérez, afirmó que el auto del juez autorizaba el desalojo de las personas, pero no la retirada de los muebles. Por ello, expresó su intención de recurrir ante el juez.
La terraza forma parte del quiosco permanente Riscal, cuya concesión municipal caducó hace 30 años. De las 72 terrazas permanentes que existen en Madrid, sólo las denominadas Riscal y España, según el concejal de Régimen Interior, José María de la Riva, "recurrieron el acuerdo al que llegamos con el resto de propietarios. Un pacto de prórroga provisional de la concesión hasta diez días antes del nuevo concurso público para su adjudicación definitiva".
Los propietarios de estos quioscos plantearon un recurso contra la decisión del pleno municipal de sacar a concurso las concesiones. Alegaron en su defensa que el Ayuntamiento, al prorrogar tácitamente durante 45 años la concesión "ha generado espectativas de derecho". Sin embargo, los propietarios del Riscal niegan haber elevado recurso legal alguno.
Por otra parte, algunos empresarios de hostelería de Villaverde realizaron desde las cuatro de la tarde de ayer un cierre parcial de sus establecimientos, seguido de una concentración ante la sede de la Junta Municipal de Distrito, para exigir la derogación de la ordenanza que regula la instalación de terrazas de verano, o al menos flexibilizar su aplicación.
Según Antonio Barata, presidente de la Asociación de Comerciantes de Villaverde, que ha promovido las movilizaciones, "este año se han concedido sólo 31 permisos para terrazas en la puerta de establecimientos, de los aproximadamente 300 que serían necesarios". Por el contrario, la presidenta de la Junta de Distrito, Dolores García Hierro, manifestó que "sólo están sin conceder 31 terrazas porque incumplían la normativa, aunque alguna de estas negativas han sido reconsideradas".