SANIDAD

Falleció el bebe que nació con dos cabezas hace 15 días en un hospital alemán

El bebé que había nacido con dos cabezas en la localidad alemana de Minden el pasado 17 de junio, falleció ayer como consecuencia de un fallo cardíaco, poco después de superar las dos semanas de vida.El bebé, de origen libanés, tenía dos cabezas perfectamente desarrolladas sobre sus hombros, dos columnas vertebrales en paralelo, así como dos aparatos digestivos, aunque sólo una pareja de pulmones y un corazón que se había mostrado muy débil desde su nacimiento. En unas declaraciones publicadas el domingo por el periódico Bild am Sonntag, el director de la clínica infantil de Mind...

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El bebé que había nacido con dos cabezas en la localidad alemana de Minden el pasado 17 de junio, falleció ayer como consecuencia de un fallo cardíaco, poco después de superar las dos semanas de vida.El bebé, de origen libanés, tenía dos cabezas perfectamente desarrolladas sobre sus hombros, dos columnas vertebrales en paralelo, así como dos aparatos digestivos, aunque sólo una pareja de pulmones y un corazón que se había mostrado muy débil desde su nacimiento. En unas declaraciones publicadas el domingo por el periódico Bild am Sonntag, el director de la clínica infantil de Minden, el profesor Werner Tilmann, destacó la imposibilidad de realizar una operación quirúrgica para separar las dos cabezas.

El médico germano comentaba que los dos cerebros comenzaban a funcionar de forma cada vez más coordinada y que, si bien al principio, se dormían con una diferencia de hasta tres horas entre sí, últimamente cogían el sueño con una diferencia no superior a los 15 minutos. Tillmann subrayó que los caracteres de los dos niños eran iguales, ya que contaban con la misma herencia genética, al tratarse de gemelos unicelulares. Admitió que la medicina desconoce todavía el origen de este tipo de malformaciones.

Asimismo destacó que el mayor problema del bebé era su corazón, cuyo desarrollo no había sido perfecto y cuya colocación tampoco era la normal, por lo que el bebé tenía que hacer un gran esfuerzo para bombear la sangre por su cuerpo. El bebé llegó a pesar 3,670 kilogramos y era alimentado por ambas bocas ingiriendo casi el doble que un niño normal.

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