Con la música a otra parte

En la cinta musical que la Dirección General de Tráfico ofrecerá este verano a los automovilistas se presenta, a través de una calculada voz de azafata, una invitación a disfrutar de la cultura, la gastronomía y el paisaje españoles. La alusión se capta fácilmente: "Abrochénse los cinturones".En una recopilación musical que los responsables de Tráfico calificaron ayer de hit parade, se ofrece lo más melódico de la década de los sesenta. El conductor cuarentón, al que pretendidamente los creativos del mundo de la publicidad han identificado como conductor tipo en las ...

En la cinta musical que la Dirección General de Tráfico ofrecerá este verano a los automovilistas se presenta, a través de una calculada voz de azafata, una invitación a disfrutar de la cultura, la gastronomía y el paisaje españoles. La alusión se capta fácilmente: "Abrochénse los cinturones".En una recopilación musical que los responsables de Tráfico calificaron ayer de hit parade, se ofrece lo más melódico de la década de los sesenta. El conductor cuarentón, al que pretendidamente los creativos del mundo de la publicidad han identificado como conductor tipo en las operaciones de Tráfico, aparece como receptor del mensaje. Padre de familia, disfruta de la ternura inicial de la canción de Ray Petterson Tell Laura I love her (Dile a Laura que la amo), y de la despedida de Adriano Celentano, con su versión italiana del Stand by me (Quedate junto a mí) -su ya clásico Pregero per te (Rogaré por ti)-, que cierra la cinta tras el saludo de la azafata.

Humor discutible

Entre canción y canción, el grupo de humor Gomaespuma aconseja en clave de absurdo al automovilista sobre la conveniencia de colocarse el cinturón de seguridad. "Hay que ponerse el cinturón", sostiene un miembro de Gomaespuma. A lo que repone su compañero: "Sí, un primo mío se puso los tirantes en vez del cinturón y le cayeron 6.000 pesetas de multa".Los radiofónicos Gomaespuma parodian también a un atribulado conductor que no se explica por qué le envía Tráfico una fotografía de su automóvil, captado a 150 kilómetros por hora, cuando esperaba la de la primera comunión de su hijo. El automovilista considera que el precio reclamado -10.000 pesetas-, es excesivo para un niño.

"El mejor seguro del automóvil y de sus ocupantes es la precaución", se afirma en un pasaje de la cinta. Este es el lema de la campaña de publicidad que Tráfico ha emprendido de cara al verano. A pesar de lo chocante de alguno de los comentarios de Gomaespuma, Tráfico no olvida dejar su número de teléfono -(91) 742 12 13- por si acaso.