Barrionuevo deberá aclarar cómo se controlaba la aplicación de la ley antiterrorista

El ministro del Interior, José Barrionuevo, deberá aclarar por escrito al tribunal que juzga la desaparición del Nani si existía, en noviembre de 1983, "algún mecanismo de control para comprobar la veracidad de la información" suministrada por un policía que solicitara la incomunicación de un detenido en virtud de la ley antiterrorista. Esta es una de las cinco preguntas que el tribunal aceptó ayer de entre las cerca de 40 aclaraciones que las defensas y la acusación de la causa pidieron a Barrionuevo.

La solicitud de aclaraciones fue hecha por las partes después de que estimasen insufi...

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El ministro del Interior, José Barrionuevo, deberá aclarar por escrito al tribunal que juzga la desaparición del Nani si existía, en noviembre de 1983, "algún mecanismo de control para comprobar la veracidad de la información" suministrada por un policía que solicitara la incomunicación de un detenido en virtud de la ley antiterrorista. Esta es una de las cinco preguntas que el tribunal aceptó ayer de entre las cerca de 40 aclaraciones que las defensas y la acusación de la causa pidieron a Barrionuevo.

La solicitud de aclaraciones fue hecha por las partes después de que estimasen insuficientes algunas de las primeras respuestas de Barrionuevo, leídas en la sala el pasado 19 de mayo. El ministro del Interior, que dispone de tres días hábiles para responder por escrito a las cinco nuevas cuestiones, habrá de concretar también si la ley antiterrorista se aplicaba a bandas de delincuentes comunes y si "resultaron posteriormente no ser ciertos" algunos de los datos del télex por el que se solicitó desde las dependencias policiales donde estaba detenido la incomunicación de Santiago Corella. Este télex contiene varios datos contradictorios con la versión mantenida por los propios procesados.Mientras, en la sesión de ayer de la vista oral, Carlos Navas Burgos, policía uniformado de servicio la noche en que desapareció Corella, testificó que un inspector le dijo en Vicálvaro, donde se desplazó para colaborar en la búsqueda del fugado: "Le hemos quitado el grillete de una mano a un detenido y se nos ha escapado". Hasta ahora, la versión oficial policial y de los procesados señalaba que Corella logró quitarse las esposas él mismo, tras lo cual escapó a la carrera. A lo largo del juicio, numerosos inspectores han declarado que los grilletes eran de muy fácil apertura y que, incluso se podían soltar con un clip.

Las manifestaciones de Navas relativas a que se encontraron en Vicálvaro con varios inspectores fueron ratificadas por el testimonio de Rafael Serrano Maldonado, otro de los policías que buscó al Nani en Vicálvaro aquella noche. Sin embargo, el compañero de Navas en el coche radiopatrulla, Juan Redondo Torres, testificó previamente que no vio ningún coche camuflado K.

Las defensas renunciaron ayer a interrogar al delincuente común Pedro María Fernández Navia, el Jomeini, quien, según varios inspectores que han declarado en el juicio como testigos, aseguró en febrero de 1987 en la jefatura de policía de Bilbao que había visto al Nani en Madrid en agosto de 1985. Fernández Navia declaró luego al juez que alguno de esos inspectores le había prometido impunidad en el tráfico de drogas a cambio de que hiciese esas manifestaciones. Las defensas también han renunciado a la declaración de Pascual Beltrán Vicente y de Francisco Javier Albarrán García, los dos detenidos que, según el atestado policial, formaron con Corella una rueda de reconocimiento en la brigada. La acusación mantiene que esa rueda no se realizó a la hora que figura en el atestado, sino horas antes.

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