AP atribuye a Ledesma el rechazo a su candidato al Consejo del Poder Judicial

El Grupo Popular mantiene la convicción de que Roberto García Calvo, magistrado del Tribunal Central de Trabajo, no fue apoyado ayer por los socialistas en el Pleno del Congreso para ocupar la vacante de vocal en el Consejo General del Poder Judicial por la oposición del ministro de Justicia, Fernando Ledesma. Esta fue la segunda vez que se rechazó el nombramiento de García Calvo. Hace tres semanas, los socialistas votaron a favor de esta candidatura, pero no prosperó por la ausencia de casi la mitad de los diputados de AP. Los socialistas ofrecieron al Grupo Popular la posibilidad de que pres...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Grupo Popular mantiene la convicción de que Roberto García Calvo, magistrado del Tribunal Central de Trabajo, no fue apoyado ayer por los socialistas en el Pleno del Congreso para ocupar la vacante de vocal en el Consejo General del Poder Judicial por la oposición del ministro de Justicia, Fernando Ledesma. Esta fue la segunda vez que se rechazó el nombramiento de García Calvo. Hace tres semanas, los socialistas votaron a favor de esta candidatura, pero no prosperó por la ausencia de casi la mitad de los diputados de AP. Los socialistas ofrecieron al Grupo Popular la posibilidad de que presenten otro candidato, lo que fue rechazado.

Alianza Popular considera que este hecho ha roto el consenso practicado desde 1977 por todos los grupos para asuntos de Estado. Antes de que el pleno del Congreso pasara a votar de forma secreta a. Rafael García Calvo proliferaron las declaraciones de aliancistas y socialistas. Las críticas. mutuas se intensificaron tras el rechazo del candidato, que se materializó de la siguiente forma: PSOE, CDS, Izquierda Unida y Democracia Cristiana votaron en blanco, el PNV dio libertad de voto y AP, Minoría Catalana y PL apoyaron a García Calvo.La razón dadla por los socialistas para no votarle ayer y sí hace tres semanas fue que no se puede someter al Congreso a la situación de proponer a un candidato que por las razones que fueran fue rechazado con anterioridad por lo que insistieron a los aliancistas para que propusieran otro nombre. El portavoz del Grupo Popular, Juan Ramón Calero, manifestó a este periódico que la verdadera razón de los socialistas viene dada por la oposición a éste que desde antiguo le profesa Fernando Ledesma.

Martín Toval negó este extremo, como también que hubiera habido en la anterior votación problemas dentro de su grupo para convencerles de que debían votarle.

No obstante, diferentes diputados socialistas reconocieron que cuando se planteó la primera vez que había que votar a García Calvo hubo numerosas protestas por la supuesta ideología ultraderechista de este magistrado. "Ya nos costó trabajo la primera vez y no se nos puede pedir que le votemos una segurida", manifestó un diputado del PSOE.

Al portavoz del grupo socialista no le constan estas resistencias por motivos ideológicos y estimó razonable que el candidato de AP sea de derechas.

El grupo de la mayoría esperará un mes por si el Grupo Popular cambia de opinión y presenta otro candidato, lo que ya ha sido rechazado, y a partir de entonces entablará conversaciones con otros grupos de oposición para que ofrezcan alternativas. "En todo caso siempre será un candidato de la oposición", dijo Martín Toval.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Las consideraciones de los aliancistas fueron muy numerosas y además de citar la supuesta antipatía de Fernando Ledesma hacia este magistrado, se alega "el nerviosismo del PSOE por el Mystère y las comisiones de investigación".

Portavoces aliancistas aseguraron que anteayer la dirección de su grupo anunció al magistrado García Calvo cuál sería el previsible desenlace de esta votación por si quería que retiraran su nombre para que no fuera derrotado por segunda vez. Según estas versiones García Calvo animó a que se siguiera adelante "porque constituiría un honor ser rechazado por los socialistas".

Sobre la firma

Archivado En