El Ayuntamiento de Marbella quiere demoler un edificio de Jesús Gil

El Ayuntamiento de Marbella (Málaga) está dispuesto a demoler las obras ilegalizables que el presidente el Atlético de Madrid, Jesús Gil promueve sin licencia de obras en Marbella, dada su obstinación en no paralizar las construcciones a pesar de los requerimientos municipales. Este criterio ha sido apoyado por todos los grupos políticos de la corporación: PSOE, AP, IU e Independientes de San Pedro de Alcántara.

El conflicto afecta a Los cipreses del mar, un proyecto de viviendas, club social y garajes, situado junto a la playa, en una de las zonas más lujosas de Marbe...

El Ayuntamiento de Marbella (Málaga) está dispuesto a demoler las obras ilegalizables que el presidente el Atlético de Madrid, Jesús Gil promueve sin licencia de obras en Marbella, dada su obstinación en no paralizar las construcciones a pesar de los requerimientos municipales. Este criterio ha sido apoyado por todos los grupos políticos de la corporación: PSOE, AP, IU e Independientes de San Pedro de Alcántara.

El conflicto afecta a Los cipreses del mar, un proyecto de viviendas, club social y garajes, situado junto a la playa, en una de las zonas más lujosas de Marbella. La comisión de gobierno denegó el 21 de septiembre la licencia para este complejo y después decretó la paralización de las obras, que hasta el momento no ha sido acatada por Vegángeles, SA, empresa de la que Gil es administrador único.En varios plenos municipales, concejales del PSOE e IU pidieron que se forzara la paralización de las obras, por el descrédito que supone para el ayuntamiento que persista una ilegalidad de ese tipo. Los ediles consideran que resta "toda fuerza moral" al municipio para actuar en otras infracciones urbanísticas.

El empeño municipal en zanjar este asunto se ratificó ayer en la comisión de Urbanismo, donde se presentó un recurso de Vegángeles SA, contra la denegación de licencia en esta promoción, que ya alcanza cinco pisos de altura. El informe delos servicios jurídicos municipales proponía desestimar el recurso y recogía la posibilidad de que el Ayuntamiento demoliera todas las obras construidas.

La demolición, según los datos municipales, afectaría a gran parte del edificio, y en especial a una franja de seis metros de profundidad, a lo largo de toda su fachada sur, que invade la zorta de vigilancia marítimo-terrestre.

Jesús Gil, que defiende la legalidad de todas sus promociones en Marbella, presentó una denuncia por falsedad en documento público contra los dos arquitectos municipales, a los que acusa de falsear el informe urbanístico por el que la comisión de gobierno le denegó la licencia de obras en este complejo.