44 millones de radiografías

La cátedra de Física Médica de la facultad de Medicina de la UniversIdad. Complutense, y el servicio de Física Médica del Hospital Universitario San Carlos están realizando un proyecto de investigación, financiado por la Comunidad Europea, el Ministerio de Sanidad, el Consejo e Seguridad Nuclear y la antigua CAY-CIT, sobre la optimización de la protección radiológica en radiodiagnóstico.Desde hace más de 20 años se sigue con interés el uso de esta técnicas debido al alto coste que supone (aproximadamente un 6% del coste sanitario en un país desarrollado) y al riesgo que puede significar su inc...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La cátedra de Física Médica de la facultad de Medicina de la UniversIdad. Complutense, y el servicio de Física Médica del Hospital Universitario San Carlos están realizando un proyecto de investigación, financiado por la Comunidad Europea, el Ministerio de Sanidad, el Consejo e Seguridad Nuclear y la antigua CAY-CIT, sobre la optimización de la protección radiológica en radiodiagnóstico.Desde hace más de 20 años se sigue con interés el uso de esta técnicas debido al alto coste que supone (aproximadamente un 6% del coste sanitario en un país desarrollado) y al riesgo que puede significar su incorrecta utilización. Aunque individualmente pequeño, este riesgo es colectivamente importante, si se tiene en cuenta que en España se realizan del orden de 19 millones de exploraciones radiológicas anuales, que generan 44 millones de radiografías.

Más información

Si se asigna un valor monetario a este riesgo, el del radiodiagnóstico español podría suponer entre 32.000 y 64.000 millones de pesetas al año (defendiendo del valor que se asigne a la unidad de riesgo). Parece evidente, por tanto, que la optimización del radiodiagnóstico es una actividad socialmente rentable, si, como ha sucedido en otros países, la dosis colectiva se puede disminuir drásticamente.

Protección

Esta situación ha llevado a la Comisión de Comunidades Europeas a patrocinar estudios para evaluar el problema de las exposiciones de la población por radiodiagnóstico. Merced a este programa y a otros similares, los países de la CEE están obteniendo datos referidos a la práctica diagnóstica en sus respectivas comunidades. Desgraciadamente, los resultados de un país dado no son trasladables a otros, ya que, por ejemplo, las técnicas y los protocolos seguidos en la realización de una exploración condicionan el valor de la dosis impartida en la misma, y tanto técnicas de trabajo como protocolos son sumamente variables.

España ha carecido prácticamente de estos datos hasta hace un año. Pero el ingreso en la, CEE ha permitido la integracíón en ese programa europeo. Su etapa final prevé la puesta en marcha de un programa piloto de garantía de calidad. En otros países, proyectos similares arrojan beneficios importantes en lo que se refiere a ahorro de material y riesgos a la población.

Además, este programa contribuirá a aplicar las recomendaciones de la CEE en materia de protección radiológica y, en particular, la aplicación de la directiva de 5 de octubre de 1984, en la que se insta a los países miembros a asegurarse de que el uso de las radiaciones en actos médicos es realizado por personal médico o técnico con competencia acreditada en protección radiológica, a fin de evitar usos inapropiados.

Archivado En