España ingresó casi 29.000 millones por exportación de acero entre enero y agosto
España ha vendido al exterior entre enero y agosto del presente año casi un millón de toneladas de acero, por un importe cercano a los 29.000 millones de pesetas. Los precios internacionales del acero han subido una media del 15% en el último trimestre, y la tendencia sigue siendo alcista, debido a las reducciones de producción registradas en diversos países, muy especialmente en Japón.
La caída del dólar no ha sido suficiente para frenar el encarecimiento del acero, fenómeno que ha revolucionado un mercado tradicionalmente bajista en los últimos años. España es responsable del 20% de l...
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España ha vendido al exterior entre enero y agosto del presente año casi un millón de toneladas de acero, por un importe cercano a los 29.000 millones de pesetas. Los precios internacionales del acero han subido una media del 15% en el último trimestre, y la tendencia sigue siendo alcista, debido a las reducciones de producción registradas en diversos países, muy especialmente en Japón.
La caída del dólar no ha sido suficiente para frenar el encarecimiento del acero, fenómeno que ha revolucionado un mercado tradicionalmente bajista en los últimos años. España es responsable del 20% de las exportaciones mundiales.La mayoría de los países exportadores, integrados en International Rebars Producers Association (Irepas), se reunirá en Madrid el próximo 17 de noviembre para analizar los grandes cambios registrados en el comercio mundial del acero. Irepas, que funciona como club de exportadores, se creó a finales de 1985 con la participación de la patronal comunitaria Eurofer, Japón, Brasil, Argentina, Venezuela, México, Suráfrica y España. En los últimos meses se han integrado también Turquía, Grecia, Nueva Zelanda, Arabia Saudi y el emirato de Qatar.
El presidente de Irepas, reelegido para 1988 en la última reunión de México, es el español Ricardo Hugas, vicepresidente comercial del grupo siderúrgico Compañía Española de Laminación, SA (CELSA). Hugas señala que el gran vuelco del mercado se de)e básicamente a las reducciones de producción practicadas por la industria de Japón, país que en los últimos años era el primer exportador y que, tras su reconversión, ha pasado a ser importador. Japón redujo su producción a causa del largo período bajista de los precios.
El cambio japonés
La decisión nipona y el subsiguiente cambio de su papel en el mercado mundial forzó a sus clientes asiáticos tradicionales a buscar nuevos proveedores, entre los que se cuenta España. Las empresas españolas mantienen una cuota cercana al 20% del mercado internacional, con un total de 1,3 millones de toneladas exportadas en 1986 y 983.073 toneladas exportadas entre enero y agosto de este año, lo que supone unos ingresos, en lo que va de año, cercanos a los 240 millones de dolares (28.800 millones de pesetas).La reactivación de la construcción a nivel internacional ha convertido asimismo en importadores, a otros países habitualmente vendedores, como Taiwan, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda. Los países suramericanos han disminuido también su ritmo de exportaciones -muy criticado por algunos países por presuntas prácticas de dumping o venta por debajo del precio de coste- a causa del incremento de su consumo interno. Estos factores han compensado sobradamente la caída del mercado chino que, tras unos años de fortísimo crecimiento y elevadas importaciones, ha optado por moderar su desarrollo.
El incremento de los consumos internos y la reducción de capacidades productivas han hecho que el volumen del comercio internacional experimente una gran contracción.