Cerca de un 15% de las brasileñas practica la prostitución
Diez millones de mujeres de diversas condiciones sociales se dedican a la prostitución en Brasil, según un informe dado a conocer con motivo del Congreso Nacional de Prostitutas, que se celebró en Río de Janeiro el martes pasado. Dos de esos 10 millones son niñas comprendidas entre los 10 y los 15 años.
El informe señala que las prostitutas constituyen cerca del 10% de la población total del país, compuesta por unos 130 millones de personas (lo que puede situar el porcentaje en torno al 15% de la población femenina, y que carecen de suficientes sistemas de prevención social y de rég...
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Diez millones de mujeres de diversas condiciones sociales se dedican a la prostitución en Brasil, según un informe dado a conocer con motivo del Congreso Nacional de Prostitutas, que se celebró en Río de Janeiro el martes pasado. Dos de esos 10 millones son niñas comprendidas entre los 10 y los 15 años.
El informe señala que las prostitutas constituyen cerca del 10% de la población total del país, compuesta por unos 130 millones de personas (lo que puede situar el porcentaje en torno al 15% de la población femenina, y que carecen de suficientes sistemas de prevención social y de régimen jurídico, lo que las obliga a trabajar en condiciones precarias.
La coordinadora del encuentro, la socióloga Gabriela Silva Leite, subrayó que la crisis económica que padece Brasil ha incrementado la población de mujeres que recurre a la prostitución como principal fuente de ingresos. Silva Leite calificó el trabajo de las prostitutas como de "alto riesgo", porque están sometidas a las agresiones de delincuentes depravados sexuales y a contraer enfermedades venéreas y el SIDA.
En el congreso, destacados sociólogos, psicólogos, abogados y médicos evaluaron con crudeza las condiciones de vida de las prostitutas y su condición de "grupo de riesgo" para el contagio y transmisión del SIDA.
Asociaciones
Como consecuencia, las prostitutas brasileñas han decidido formar asociaciones en todos los Estados del país con objeto de defender sus derechos y, especialmente, presionar ante las instituciones para conseguir el acceso a las prestaciones de la seguridad social.A tenor de los informes sobre este grave problema social, la inmensa mayoría de las prostitutas son analfabetas e iniciaron su profesión en muchos casos a los 10 años de edad, empujadas por las necesidades económicas familiares y sociales.
Según un informe publicado por el diario Jornal do Brasil, la cifra de las niñas comprendidas entre los 10 y los 15 años que se dedican habitualmente a la profesión puede elevarse a los dos millones.
El citado documento periodístico agrega que de los 66 millones que componen la población infantil de Brasil, 45 viven en condiciones infrahumanas, 25 en situación de alto riesgo, 15 sufren desnutrición y 12 millones están abandonados y se ven obligados a arrastrar una vida nómada por las calles de las grandes ciudades de una nación considerada como la más desarrollada de Suramérica.
La Iglesia católica brasileña ha iniciado una campaña de asistencia a los menores para evitar que esta población infantil caiga en la delincuencia, algo que sucede con extrema frecuencia, según lo demuestran los registros policiales. Las autoridades de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) denunciaron que en las calles de las principales ciudades turísticas del país, como Río de Janeiro, Sao Paulo y Salvador, centenares de niñas menores de 15 años sufren abusos sexuales de los delincuentes.
El congreso de prostitutas, en el que participaron cerca de 300 representantes de los 10 principales Estados brasileños, denunció también la violencia de que son objeto estas mujeres por parte de la propia policía, que, tras detenerlas, las somete a constantes agresiones.
Las prostitutas brasileñas denuncian la discriminación que sufren sus hijos en las escuelas y colegios.
De acuerdo con el relato de algunas de las participantes en el encuentro de Río, en los últimos años, las necesidades económicas han empujado a la prostitución incluso a muchas mujeres casadas.