Thatcher vincula en su visita a la URSS la causa de la paz a la de la libertad y la justicia

La primera ministra británica, Margaret Thatcher, que llegó el sábado en visita oficial a la Unión Soviética, declaró ayer en un monasterio ortodoxo cercano a Moscú que el objetivo de su visita es "mantener la llama de la paz, pero también, al mismo tiempo, la de la libertad y la justicia". Margaret Thatcher recibió durante su visita un baño de muchedumbres, con profunda sorpresa por parte de los soviéticos, poco habituados a ver desde tan cerca a un dirigente occidental. Según los observadores en Moscú, es la primera vez que se ve en la URSS al líder de un país de Occidente mezclarse con la g...

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La primera ministra británica, Margaret Thatcher, que llegó el sábado en visita oficial a la Unión Soviética, declaró ayer en un monasterio ortodoxo cercano a Moscú que el objetivo de su visita es "mantener la llama de la paz, pero también, al mismo tiempo, la de la libertad y la justicia". Margaret Thatcher recibió durante su visita un baño de muchedumbres, con profunda sorpresa por parte de los soviéticos, poco habituados a ver desde tan cerca a un dirigente occidental. Según los observadores en Moscú, es la primera vez que se ve en la URSS al líder de un país de Occidente mezclarse con la gente.

Thatcher se trasladó ayer al monasterio de Zagorsk, situado a 70 kilómetros al noreste de Moscú, que está considerado como el equivalente del Vaticano para la religión ortodoxa. Desde su llegada, se mezcló con la muchedumbre que se había reunido en el exterior. Centenares de ciudadanos soviéticos se habían trasladado al monasterio para ver de cerca a la primera ministra británica. "No es una dama de hierro", declaró uno de los visitantes, "sino una mujer como otra cualquiera".Con ocasión de un almuerzo que le fue ofrecido en el monasterio, Thatcher invocó "la libertad de creencias religiosas", pidiendo la "libertad para las personas encarceladas por su confesión religiosa".

Posteriormente, la primera ministra británica se dirigió al barrio moscovita de Krylatskoye, donde visitó un apartamento colectivo en el que vive la familia de un ingeniero que habla inglés. Los vecinos de este ingeniero invitaron igualmente a Margaret Thatcher a que pasara a sus casas. La visita había sido organizada por las autoridades municipales de Moscú.

Cuando la primera ministra británica abandonó el edificio, la gente que se encontraba en la calle comenzó a aplaudir, de forma aparentemente espontánea. Margaret Thatcher estaba acompañada por el alcalde de Moscú, Valeri Saikin, con quien más tarde visitó un supermercado.

La televisión soviética no mostró ayer las imágenes de la visita de Margaret Thatcher al monasterio durante un reportaje sobre el segundo día de estancia oficial de la primera ministra británica en Moscú, si bien el presentador del programa hizo referencia a la estancia de Thatcher en él. Las imágenes mostraban únicamente la visita al barrio moscovita de Krylatskoye, al supermercado y al Bolshoi, donde aparecía con el líder soviético, Mijail Gorbachov, y su esposa, Raisa.

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