Gobierno y PSOE consideran que la moción de censura servirá a González para demostrar que no está' acosado

El Gobierno y el PSOE han mostrado su satisfacción, desde el mismo momento en que conocieron la presentación de la moción de censura por parte de Alianza Popular, ante las posibilidades que se le ofrecen al jefe del Ejecutivo, Felipe González, de comparecer ante la opinión pública y revitalizar su imagen en un momento de tensión social, con fuerte sensación de acoso para el Gabinete socialista. El debate de la moción se interpreta en estos medios como un eslabón más de la estrategia socialista para "tomar la iniciativa" ante el panorama de contestación social, según informaron fuentes gubernam...

El Gobierno y el PSOE han mostrado su satisfacción, desde el mismo momento en que conocieron la presentación de la moción de censura por parte de Alianza Popular, ante las posibilidades que se le ofrecen al jefe del Ejecutivo, Felipe González, de comparecer ante la opinión pública y revitalizar su imagen en un momento de tensión social, con fuerte sensación de acoso para el Gabinete socialista. El debate de la moción se interpreta en estos medios como un eslabón más de la estrategia socialista para "tomar la iniciativa" ante el panorama de contestación social, según informaron fuentes gubernamentales.

El Gobierno aún no ha decidido si utilizará la técnica de la "rueda de ministros" contra el candidato aliancista Antonio Hernández Mancha en el debate que comenzará mañana, jueves, a las diez de la mañana, proseguirá el viernes y se interrumpirá para celebrar la votación final el lunes a las seis de la tarde."Creemos que al Gobierno.le puede venir muy bien esta moción de censura planteada por AP", dijeron medios gubernamentales, que recordaron que la sesión será retransmitida en directo por TVE y por las principales cadenas radiofónicas. "Por estrictas razones de aritmética parlamentaria no hay posibilidad de que AP triunfe; además, Hernández Mancha se encontrará en la tesitura de tener que responder a los portavoces de oposición, que van a ser especialmente duros con él, según se desprende' de sus conversaciones", añadieron las mismas fuentes.

No obstante, no todo es optimismo, porque el Gobierno es consciente de que aunque los grupos de oposición no van a apoyar la moción, aprovecharán para realizar una dura crítica al Ejecutivo. "El Gobierno se verá obligado no sólo a responder a Hernándeí Mahcha, sino a todos los portavoces, que recordarán la situación de conflictividad existen según el análisis de ¡as mismas fuentes socialistas.

"Pedir árnica"

La dirección de AP conoce bien que la actitud del resto de los grupos, a la vista de las primeras reacciones, no será benévola o de pasividad: en la mañana de ayer, emisarios de AP iniciaron contactos oficiosos con portavoces de los grupos parlamentarios con la sugerencia de que no empleen excesiva dureza durante el debate frente al candidato Hernández Mancha. "Vinieron a pedir árnica", según expresión de uno de los contactados.

El debate de la moción de censura comenzará mañana jueves a las diez de la mañana, según el acuerdo adoptado por la Mesa y la Junta de Portavoces del Congreso, continuará el viernes y la votación se llevará a cabo en la tarde del próximo lunes. Juan Ramón Calero, portavoz de AP, presentará la moción, y posteriormente el candidato a la presidencia del Gobierno, Antonio Hernández Mancha, expondrá su programa. A partir de ahí el orden de intervenciones se presenta incierto, dado que el Gobierno puede intervenir en cualquier momento del debate, incluso replicar a Calero antes de intervenir Hernández Mancha.

El Gobierno estudia si Felipe González intervendrá en solitario o si se dará la "rueda de. ministros", como hizo Adolfo Suárez en la moción de censura socialista de 1980.

Calero se vio forzado ayer en la Junta de Portavoces a aceptar, casi de inmediato, la imposición socialista de que las sesiones de la moción comiencen mañana, prosigan el viernes y que la votación se celebre el próximo lunes. Todos los portavoces apreciaron que Calero hubiera preferido posponer el debate, al menos hasta el lunes, pero que se vio obligado a no forcejear en este punto para no dar la impresión de que el candidato Hernández Mancha necesitase tiempo para preparar su intervención.

CDS, Izquierda Unida, PDP y el diputado del Mixto Hipólito Gómez de las Roces, defendieron la "unidad de acto", es decir, que no se interrumpiera la sesión, con un fin de semana en blanco. El representante de Minoría Catalana, Josep María Trías de Bes, defendió la celebración del acto "cuanto antes".

Calero sugirió, en otro momento, que se respetara el orden del día de esta semana, sin interrumpir la actividad parlamentaria. El ministro de Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero, aprovechó esta intervención para hacerle notar al representante de AP la incoherencia de su planteamiento ante la posibilidad teórica de que, la próxima semana, fuera el grupo aliancista quien gobernase.

Distintos portavoces de la oposición comentaron la actitud del CDS, desde que se ha conocido la presentación de la moción de censura, "excesivamente obsesionados", afirmaron, con la creencia de que,se trata de un "complot" entre ÁP y el PSOE contra Adolfó Suárez. La oposición no aliancista ha criticado el hecho de que se hayan enterado de la presentación de la moción de censura en el momento en que se hizo efectivo y que, previamente, no se haya consultado con ellos. Esta actitud reafirmaba la intención de que ningún grupo de oposición vaya a sumarse a la moción de censura.

[Por su parte, el presidente del PDP, Oscar Alzaga declaró ayer en rueda de prensa que su partido decidirá el sentido de su voto a la moción "a la vista del desarrollo del debate".]