La reforma de la sociedad

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(...) La reunión juvenil fue convocada por Comunione e Liberazione (CL), un combativo movimiento estudiantil de la Iglesia Católica, fundado hace 31 años en Italia como respuesta cristiana a la cre ciente atracción del marxismo y otras filosorias ateas, Rímini es la sede del festival anual de CL, de un semana de duración, denomi nado simplemente la Reunión, y el tema de este año, la información, se anuncia con un original título: "Carretes. Bytes. Mensajes".Se considera miembro de CL a cualquiera que trabaje voluntariamente para el movimiento y que asis...

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(...) La reunión juvenil fue convocada por Comunione e Liberazione (CL), un combativo movimiento estudiantil de la Iglesia Católica, fundado hace 31 años en Italia como respuesta cristiana a la cre ciente atracción del marxismo y otras filosorias ateas, Rímini es la sede del festival anual de CL, de un semana de duración, denomi nado simplemente la Reunión, y el tema de este año, la información, se anuncia con un original título: "Carretes. Bytes. Mensajes".Se considera miembro de CL a cualquiera que trabaje voluntariamente para el movimiento y que asista a sus reuniones. Sus seguidores, que a veces son denominados los "nuevos jesuítas", se esfuerzan en recobrar almas para el cristianismo y luchan contra el comunismo en todo el mundo.

Su ardor y energia gustan mucho al papa Juan Pablo II, quien en sus vía es ha predicado contra el marxismo y el materialismo. Dedicado a una diversidad de programas sociales, CL organiza centros culturales de barrio y cursos nocturnos para desempleados. Según un estudiante unversitarío del norte de Italia: "Todos nosotros queremos hacer algo útil en la vida. Esto es lo que hace que la reunión sea tan especial. Es una experiencia madura para gente joven."(...)

El grito de batalla del fundador no siempre sonó bien en los años 60 y 70. Los papas Juan XXIII y Pablo VI estaban tendiendo puentes hacia los marxistas y ateos, una política que atrae aún a algunos de los obispos italianos. Muchos de ellos, incluído el influyente jesuíta cardenal Martini, arzobispo de Milán, están consternados por el espíritu independiente de CL y su insistencia en que un cristiano auténtico sólo puede tener un único concepto político y social, un error al que dan el calificativo de "integrismo". "No queremos imponer a nadie nuestros ideales cristianos, pero queremos igualdad para que se nos escuche", declara uno de los miembros de la organización.

Pero el movimiento encuentra claro apoyo en donde más importa. El papa Juan Pablo II confia en los grupos laicos, notablemente en el secreto y disciplinado Opus Dei, para promover los valores cristianos en una sociedad que él considera cada vez más materialista. El Pontífice, que tuvo contacto por primera vez con CL cuando era obispo en Polonia, apareció en la reunión de Rímini de 1982 para impartir a la multitud su bendición especial. Aún continúa recibiendo a delegados de la organización en audiencias especiales. (...)

6 de septiembre