Cien padres de alumnos protestan con un encierro contra la situación del colegio Atocha

Más de un centenar de personas, padres de alumnos del colegio Atocha, en el número 45 de la calle del mismo nombre, mantienen un encierro desde el pasado viernes para denunciar la situación del centro. Según una portavoz de los padres encerrados, "a la dirección no le interesa que el colegio siga funcionando y lleva haciendo la vida imposible a profesores, alumnos y padres desde hace tres años".

José Miguel Brox, presidente del consejo de administración del colegio Atocha, S A, considera inviable el "concierto en régimen singular" promovido por la Asociación de Padres de Alumnos (APA) a...

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Más de un centenar de personas, padres de alumnos del colegio Atocha, en el número 45 de la calle del mismo nombre, mantienen un encierro desde el pasado viernes para denunciar la situación del centro. Según una portavoz de los padres encerrados, "a la dirección no le interesa que el colegio siga funcionando y lleva haciendo la vida imposible a profesores, alumnos y padres desde hace tres años".

José Miguel Brox, presidente del consejo de administración del colegio Atocha, S A, considera inviable el "concierto en régimen singular" promovido por la Asociación de Padres de Alumnos (APA) ante el Ministerio de Educación. El colegio, en el que actualmente estudian poco más de 300 niños, ha perdido la mitad de sus alumnos en tres años. Según un portavoz de los padres encerrados, la causa de este descenso de la demanda está en "las continuas trabas puestas por los responsables del centro, más interesados en su cierre que en su funcionamiento".Los padres afectados se refieren en concreto al cese de actividades extracadémicas, despidos de varios profesores y deficiente estado de las instalaciones. "Durante este curso", señalan, "los alumnos han tenido que dar las clases donde podían; se cayó el techo y quedó inutilizado el tercer piso".

El pasado 28 de mayo, José Miguel Brox dirigió un escrito a los padres en el que les comunicaba que el colegio seguirá funcionando como "no concertado". La escasez de alumnos, según el presidente del consejo de administración, hacía inviable el funcionamiento como centro concertado.

Los padres replican a lo que, en su opinión, supone un "cierre encubierto" del colegio: "El precio de la mensualidades sin la subvención del Ministerio de Edicación será aproximadamente de 8.000 pesetas, lo que hará imposible que más de la mitad de los padres sigan enviando a sus hijos. El cierre está casi garantizado".

La propiedad del colegio Atocha no parece estar muy clara. El colegio pertenecía a la institución San Estanislao de Kotska, junto con otros dos centros (el Santa Isabel y el San Ildefonso) situados en la misma zona. En 1980 se creó la entidad SEK Atocha S. L, y en 1984 se creó Colegio Atocha, S. A, en la que participaban con acciones algunos padres de alumnos. Una decena de estos estaban en el consejo de Administración.

Según los encerrados, el responsable es Felipe Segovia Olmo, director de la institución San Estanislao de Kotska, que tiene otros tres centros en Madrid y varios más repartidos por el mundo. José Miguel Brox es, según los padres, un hombre de paja, que además ha tenido que abandonar varias veces su cargo por problemas de salud.

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