EL SECTOR PÚBLICO, CENTRO DE LOS CONFLICTOS LABORALES

Un viejo y repetido conflicto económico

El conflicto que enfrenta a la compañía Iberia con el Sindicato de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA) es, en gran parte, repetición del registrado hace exactamente dos años.

Los motivos, al menos, se parecen demasiado a los que provocaron, en junio de 1984, la huelga más larga que se recuerda en los anales de la empresa.

En aquella ocasión, los pilotos fueron a la huelga -que concluyó después de 31 días con la aplicación de un laudo posteriormente anulado por el Tribunal Supremo- para exigir el ingreso de 34 nuevos pilotos aceptado por la compañía en el convenio de 1984. Pero, ...

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El conflicto que enfrenta a la compañía Iberia con el Sindicato de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA) es, en gran parte, repetición del registrado hace exactamente dos años.

Los motivos, al menos, se parecen demasiado a los que provocaron, en junio de 1984, la huelga más larga que se recuerda en los anales de la empresa.

En aquella ocasión, los pilotos fueron a la huelga -que concluyó después de 31 días con la aplicación de un laudo posteriormente anulado por el Tribunal Supremo- para exigir el ingreso de 34 nuevos pilotos aceptado por la compañía en el convenio de 1984. Pero, en el fondo, también se debatía el viejo problema de los períodos de descanso, las horas de vuelo de los pilotos y su compensación económica.

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El desarrollo de la huelga y las tensiones generadas por la misma -Iberia procedió al despido de los pilotos y abrió expedientes disciplinarios- encubrió gran parte de los problemas de fondo, pero no resolvió los orígenes del conflicto.

En esta ocasión el contencioso entre Iberia y los pilotos tiene las mismas razones. Nuevamente la tradicional escasez de personal de vuelo se traduce en una reivindicación puramente económica. La sentencia del Tribunal Central de Trabajo que establece la imposibilidad de hacer coincidir los períodos de descanso antes del vuelo con los días libres exigiría de Iberia un aumento considerable de plantilla. Ante la imposibilidad de cubrir inmediatamente las plazas para hacer efectiva la sentencia o proceder a un cierre de líneas que, sobre todo en período electoral, más significativa si se tiene en cuenta que la masa salarial de los 17.000 trabajadores de tierra es de 35.500 millones de pesetas. En estas condiciones, la solución que pueda darse al conflicto de los pilotos reviste especiales dificultades. Los demás colectivos de Iberia no aceptarán probablemente que, con la excusa del período de descanso, se incremente el salario a los pilotos en porcentajes muy superiores a ¡os del resto de la plantilla mandantes de vuelo se sitúa en lo millones de pesetas de ingresos brutos al año. Un segundo piloto tiene como media un salario anual de 6,7 millones de pesetas, cifra que no baja de los 4 millones de pesetas en el personal de nuevo ingreso.

Los 888 pilotos de Iberia tienen una masa salarial de 7.500 millones de pesetas. La cifra resulta más significativa si se tiene en cuenta que la masa salarial de los 17.000 trabajadores de tierra es de 35.500 millones de pesetas. En estas condiciones, la solución que pueda darse al conflicto de los pilotos reviste especiales dificultades. Los demás colectivos de Iberia no aceptarán probablemente que, con la excusa del período de descanso, se incremente el. salario a los pilotos en porcentajes muy superiores a los del resto de la plantilla.

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