Halladas dosis mortales de cianuro en la sangre de Sindona

Francesco Nicrosini, director del hospital civil de Voghera, al norte de Italia, confirmó ayer oficialmente que en la sangre y en la orina del banquero Michele Sindona ha sido hallada una cantidad de cianuro superior a la que normalmente es una dosis mortal. La certeza del envenenamiento es ya absoluta tras repetirse tres veces los análisis.

Si Sindona no murió instantáneamente fue sólo debido a que, al estar permanentemente custodiado, recibió asistencia médica inmediata. Habría bastado un cuarto de hora de retraso para que fallecimiento fuera inevitable. Anoche, Sindona seguía viviend...

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Francesco Nicrosini, director del hospital civil de Voghera, al norte de Italia, confirmó ayer oficialmente que en la sangre y en la orina del banquero Michele Sindona ha sido hallada una cantidad de cianuro superior a la que normalmente es una dosis mortal. La certeza del envenenamiento es ya absoluta tras repetirse tres veces los análisis.

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Si Sindona no murió instantáneamente fue sólo debido a que, al estar permanentemente custodiado, recibió asistencia médica inmediata. Habría bastado un cuarto de hora de retraso para que fallecimiento fuera inevitable. Anoche, Sindona seguía viviendo artificialmente, gracias al auxilio de una máquina que le proporciona oxígeno. Sus funciones vitales estaban casi totalmente paralizadas. No existe esperanza de que pueda sobrevivir.El ministro de Justicia, Mino Martinazzoli, informó ayer al Parlamento sobre la forma en que pudo producirse el presunto atentado -o intento de suicidio- al famoso banquero siciliano. El ministro respondió a 13 preguntas de los diversos grupos parlamentarios, tanto del Gobierno como de la oposición. El ministro dijo que estaba dispuesto a dimitir inmediatamente si aparecían responsabilidades de su ministerio en el suceso y dio a conocer las rígidas disposiciones que dictó en 1984, cuando Sindona ingresó en la cárcel de máxima seguridad de Vogliera. Técnicamente, era imposible que el veneno hubiese llegado hasta el café de Sindona -que sufrió la crisis tras desayunar-, pero Martinazzoli subrayó que, aun en el caso de que alguien no haya cumplido sus órdenes, el asumiría la responsabilidad.,

"Me han envenenadol"

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Según la versión del ministro, expresada ante la magistratura de Voghera y de Milán, Sindona cayó fulminado tras haber bebido un poco de café. Y ha explicado que dos de los agentesque le asistieron al instante le oyeron decir por dos veces, antes de perder el conocimiento: "Me han envenenado". El ministro afirmó que Sindona, que era muy rutinario, la mañana del envenenamiento no bebió el café en la celda, sino en el retrete, aunque no dio por seguro este dato.

En realidad, tampoco estaba claro ayer si Sindona se sintió mal después de haber bebido el café o un vaso de leche caliente. Por lo que se refiere a la hipótesis del suicidio, el ministro de Justicia pareció excluírla, al explicar que en las cartas que los jueces han encontrado sobre la mesa de Sindona para sus familiares, ya cerradas y preparadas para ser echadas al correo, "no aparecen indicios de voluntad de suicidarse".

La investigación sobre el envenenamiento de Sindona ha sido encargada al fiscal general de Milán Antonio Corias, por el hecho de que los magistrados de Voghera están cargados de trabajo y no podrían hacer frente inmediatamente a la compleja investigación.

Todas las reacciones en el mundo político italiano hain expresado preocupación. Algunos prefieren, sin embargo, esperar a que se haga la autopsia, considerando a Sindona ya muerto. Otros, sobre todo los socialistas, comunistas, republicanos, radicales e independientes de izquierdas, han declarado, sin pelos en la lengua, que se trata de un acto "clásico de la Mafia", y que el envenenamiento de Sindona es la mejor demostración de que alguien temía que ahora, condenado a cadena perpetua, humillado y sin esperanzas, pudiera empezar a confesar lo que hasta el jueves había callado, como escribió el diario L'Avanti, órgano oficial del partido socialista.

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