Presos de concienciaGRECIA

Gabriel Tzintziras

Fue juzgado en marzo de 1985 por negarse a cumplir el servicio, militar. Se le condenó a una pena de cuatro años de cárcel, que está cumpliendo en la prisión militar de AvIon, 30 kilómetros al norte de la capital, Atenas.Gabriel Tzintziras, un testigo de Jehová, ha renunciado a prestar tanto el servicio militar como el servicio militar no-armado, única alternativa legalmente reconocida, fundándose en motivos religiosos. El servicio militar no-armado tiene una duración de cuatro años. Amnistía Internacional considera esta duración como punitiva, por ser considerablemente superior al período de ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Fue juzgado en marzo de 1985 por negarse a cumplir el servicio, militar. Se le condenó a una pena de cuatro años de cárcel, que está cumpliendo en la prisión militar de AvIon, 30 kilómetros al norte de la capital, Atenas.Gabriel Tzintziras, un testigo de Jehová, ha renunciado a prestar tanto el servicio militar como el servicio militar no-armado, única alternativa legalmente reconocida, fundándose en motivos religiosos. El servicio militar no-armado tiene una duración de cuatro años. Amnistía Internacional considera esta duración como punitiva, por ser considerablemente superior al período de servicio militar normal, que se prolonga por 22 meses. La ley griega no prevé la objeción de conciencia por motivos éticos ni la existencia de un servicio civil alternativo.

Todos los objetores de conciencia que se niegan a prestar el servicio militar no-armado son condenados por consejos de guerra a una pena mínima de cuatro años y medio de cárcel y la privación de sus derechos civiles por cinco años o más.

Amnistía Internacional ha adoptado a Gabriel Tzintziras como preso de conciencia y ha manifestado reiteradamente su preocupación al Consejo de Europa, instando a que se pongan en práctica las resoluciones que "introducen el derecho a la objeción de conciencia al servicio militar en la Convención Europea de Derechos Humanos".

Se ruega enviar cartas cortésmente redactadas solicitando la liberación de Gabriel Tzintziras a: Christos Sartzetakis, presidente. Oficina de la Presidencia. 17 Stisichorou. Atenas. Grecia.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En