Salgado Zenha recibe el apoyo de los comunistas y de Eanes

Fin de campaña clarificador para los candidatos a las elecciones presidenciales portuguesas del próximo domingo. En sus últimos mítines, en la zona de Lisboa, y en sus espacios finales de propaganda radiotelevisada, cada uno se presenta con lo que considera sus mejores triunfos para tratar de convencer a los indecisos. Tal como estaba previsto desde el inicio de la campaña, hace dos semanas, el candidato comunista, Ángelo Veloso, formalizó ayer su renuncia en favor de Francisco Salgado Zenha, a quien el presidente de la República, general Ramalho Eanes, dará hoy su apoyo por radio y televisión...

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Fin de campaña clarificador para los candidatos a las elecciones presidenciales portuguesas del próximo domingo. En sus últimos mítines, en la zona de Lisboa, y en sus espacios finales de propaganda radiotelevisada, cada uno se presenta con lo que considera sus mejores triunfos para tratar de convencer a los indecisos. Tal como estaba previsto desde el inicio de la campaña, hace dos semanas, el candidato comunista, Ángelo Veloso, formalizó ayer su renuncia en favor de Francisco Salgado Zenha, a quien el presidente de la República, general Ramalho Eanes, dará hoy su apoyo por radio y televisión.

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La decisión del Partido Comunista Portugués (PCP) culmina una de sus más difíciles batallas estratégicas contra la tentación izquierdista de una parte de su electorado, femenino sobre todo, seducido por el discurso diferente de María Lourdes Pintasilgo.Con razón o sin ella, Álvaro Cunhal y los dirigentes del PCP piensan que está en juego en estos comicios algo más que una mera batalla política, y entre la estabilidad o la subversión del sistema, han optado, como en 1975, por el mal menor, apoyando al único candidato que, según ellos, "no es anticomunista".

El resultado de la machacona campaña del partido comunista a favor del "único demócrata capaz de vencer a la derecha" ante el cerca de un millón de electores comunistas se verá en las urnas, pero desde este momento la candidatura de Pintasilgo, claramente en declive en los últimos días, constituye un fenómeno que los estados mayores de los partidos no pueden ignorar.

El más reciente sondeo de la empresa Norma, realizado al principio de la campaña, y cuyos resultados -no publicados en Portugal por prohibición legal- han obligado a todos los candidatos a alterar más o menos radicalmente el tono y la orientación de sus campañas, muestra que, al contrario de las afirmaciones de muchos analistas, Pintasilgo no es sólo un problema para los comunistas y los eanistas: con el 17,4% de las intenciones de voto, la candidata antipartidos está muy próxima a la situación de Soares.

La encuesta, realizada antes de la intervención personal de Eanes por televisión -prevista para hoy- a favor de Salgado Zenha, tiene en cuenta la influencia -confesada por las personas entrevistadas- de la toma de posición del actual presidente de la República, fácilmente explicable porque era entre el electorado del Partido Renovador Democrático (PRD), fundamentalmente eanista, donde se registraba la mayor indecisión (un 32%, contra una media del 22,3%).

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Con esta intervención de Eanes, las intenciones de voto a favor del candidato de la derecha, Freitas do Amaral, pasarían del 40 al 38,2%; a favor de Salgado Zenha, del 20,4% al 25,4%; de Mario Soares, del 20,7% al 18,8%, y de Pintasilgo, del 17,9% al 17,4%.

Tanto Freitas do Amaral como Salgado Zenha miden la importancia, en una campaña tan personalizada como una elección a la suprema magistratura del Estado, de sus partidarios número uno: el primer ministro, Aníbal Cavaco Silva, para el ex líder democristiano, y el presidente cesante, para el segundo.

A pesar de las reservas de muchos dirigentes socialdemócrata respecto a su ex aliado democristiano y a los intentos por reconstruir la Alianza Democrática, la ex alcaldesa de Cascais Helena Roseta, hoy alejada de todo cargo, es la única personalidad del PSD que ha dado públicamente su apoyo a Soares.

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