Gestiones infructuosas de la delegación parlamentaria española en Chile

La delegación de siete parlamentarios españoles que realizaron una visita de cinco días a Chile, en el curso de la cual se entrevistaron con los ministros del Interior y de Relaciones Exteriores, Ricardo García y Jaime del Valle, respectivamente, ha mostrado su preocupación por la negativa del régimen chileno a iniciar un camino de transición democrática. "Las reuniones fueron cordiales y muy respetuosas en la forma, pero absolutamente discrepantes en cuanto al fondo", dijo el diputado Javier Gil Lázaro, de Alianza Popular.

Los parlamentarios también plantearon a los ministros chile...

La delegación de siete parlamentarios españoles que realizaron una visita de cinco días a Chile, en el curso de la cual se entrevistaron con los ministros del Interior y de Relaciones Exteriores, Ricardo García y Jaime del Valle, respectivamente, ha mostrado su preocupación por la negativa del régimen chileno a iniciar un camino de transición democrática. "Las reuniones fueron cordiales y muy respetuosas en la forma, pero absolutamente discrepantes en cuanto al fondo", dijo el diputado Javier Gil Lázaro, de Alianza Popular.

Los parlamentarios también plantearon a los ministros chilenos su preocupación por tres casos de violaciones de derechos humanos que afectan a ciudadanos españoles: la muerte aún no aclarada de Carmelo Soria, ex funcionario de CEPAL (Comisión Económica Para América Latina y el Caribe), en 1976, y la desaparición de la militante socialista Michelle Peña, en 1975, y del sacerdote valenciano Antonio Llidó, en 1974.

El diputado socialista Ciriacode Vicente, primer secretario del Congreso, que encabeza la delegación, afirmó: "El ministro del Interior nos dijo que no sabía nada, y el canciller tenía una nota que había remitido a la embajada española, cuyos datos no coincidían con los que la comisión parlamentaria del Senado español tenía sobre los casos".