Discriminación
Permítame que rectifique la información vertida en su diario el día 26 sobre los acontecimientos ocurridos en el estadio Álvarez Claro de Melilla el domingo día 24.Nada más entrar en el estadio mencionado, un par de espectadores recibieron mi presencia con frases tales como: "Ya ha entrado un moro", "Qué pestazo a moro huele aquí", "Qué asco da este tío moro". Yo asumí estas palabras sin darle importancia.
Los posteriores incidentes comenzaron cuando 10 minutos más tarde algún que otro individuo exaltado me interpeló con insultos por mi solidaridad con la causa de los musulmanes de Meli...
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Permítame que rectifique la información vertida en su diario el día 26 sobre los acontecimientos ocurridos en el estadio Álvarez Claro de Melilla el domingo día 24.Nada más entrar en el estadio mencionado, un par de espectadores recibieron mi presencia con frases tales como: "Ya ha entrado un moro", "Qué pestazo a moro huele aquí", "Qué asco da este tío moro". Yo asumí estas palabras sin darle importancia.
Los posteriores incidentes comenzaron cuando 10 minutos más tarde algún que otro individuo exaltado me interpeló con insultos por mi solidaridad con la causa de los musulmanes de Melilla. Mi respuesta fue el más completo silencio.
Por otra parte, no fui expulsado del estadio, sino que decidí salir en evitación de mayores males y mi salida, si bien es verdad que fue acompañada por malos tratos verbales, no fue, como se dice en su información, a empujones y puntapiés.
Contra mí y otros se manifestaba así la primera reacción de un pueblo melillense no musulmán que, contra todo lo esperado, está radicalmente a favor de la ley de extranjería y en contra de quienes, rechazándola, nos manifestamos el día 23 al lado de miembros destacados de la Asociación Pro Derechos Humanos.
Espero que la ciudad recupere la tranquilidad y se entienda que la reivindicación musulmana es por la españolidad y, en mi sentir, por la justicia y la dignidad de nuestra democracia, todo ello al amparo de la Constitución vigente.- . .